Opel anunció esta semana que se dispone a discontinuar la producción de tres modelos de su catálogo para focalizar sus esfuerzos en la introducción de nuevos coches más sencillos de fabricar, basados en las plataformas del Grupo PSA y capaces de adoptar la electrificación con mayor facilidad. El fabricante de Rüsselsheim reveló mediante comunicado que los modelos compacto y subcompacto Karl y Adam terminarán su producción en 2019 sin que una nueva generación los releve. El hecho de eliminar estos dos productos de su gama de vehículos ayudará a Opel a reducir la complejidad y aumentar la eficiencia de su gama con el fin de cumplir con los objetivos de CO2 endurecidos que se avecinan en los próximos años.
Al Karl, que se fabrica en Changwong, Corea del Sur, sobre una plataforma de General Motors, y al Adam, que se construye en Eisenach, Alemania, se les unirá el Cabrio, un modelo descapotable que se comercializa fuera de España bajo el nombre de Cascada y que dejará de fabricarse en Gliwice, Polonia. Todos ellos, ya sea porque su construcción sobre una plataforma no-PSA sea más costosa o por la complejidad de su fabricación –como es el caso del descapotable– son los modelos menos rentables para PSA desde que adquirió Opel en 2017 por 2.200 millones de euros.
En cambio Opel ha anunciado tres lanzamientos clave para los próximos dos años: el primero de ellos es el nuevo Corsa, que empleará la plataforma electrificable CMP del grupo francés y llegará, un año después de su lanzamiento al mercado, con una versión 100% eléctrica que se podrá encargar a partir del próximo verano. El segundo es el sucesor del Mokka X y el tercero la nueva furgoneta Vivaro. Aunque estos dos últimos no han sido anunciados con versiones eléctricas, los planes del Grupo PSA incluyen una versión electrificada –ya sea 100% eléctrica o híbrida enchufable– de todos y cada uno de los modelos que tenga en el mercado para el año 2024.
Paralelamente Opel ya ha confirmado que iniciará la producción de una versión híbrida enchufable del Grandland X a partir del próximo año. Para su lanzamiento, que tendrá como principal novedad una actualización estética de mitad de ciclo, también estará lista, además de la versión PHEV, una variante de siete plazas. Otro objetivo del fabricante alemán es el de distanciar el Grandland del Mokka para evitar que canibalicen ventas el uno al otro, por lo que una versión de mayor capacidad del Grandland tendría mucho sentido. A esto hay que sumarle que el próximo Mokka dejará de sentarse sobre una plataforma GM para convertirse en un modelo PSA, con lo que probablemente pueda reducir ligeramente su tamaño.