Porsche tiene muy claro que su futuro más inmediato pasa por electrificar intensamente toda la gama. El éxito de ventas del Porsche Taycan ha abierto los ojos de muchos escépticos. Aunque el próximo modelo 100% eléctrico será el Porsche Macan, su hermano, el Porsche Cayenne está ultimando la fase de pruebas de su nueva edición. Los alemanes trabajan en una de las actualizaciones más profundas que hayan realizado. Nuevas tecnologías, un diseño diferente y una contundente revisión mecánica es lo que nos espera.
Ya en el modelo actual el Porsche Cayenne prescinde de cualquier mecánica eléctrica en aras de una movilidad más eficiente. Los diésel tradicionales se han sustituido por versiones híbridas enchufables de alto rendimiento. Los Porsche Cayenne E-Hybrid y Turbo S E-Hybrid destacan por su elevada potencia y por su confortable comportamiento, pero no por su destacada autonomía eléctrica. En el mejor de los casos hablamos de un rango homologado de 44 kilómetros, lo justo como para conseguir la etiqueta CERO de la DGT.
Se espera que la revisión en la que trabajan los ingenieros incluya versiones híbridas enchufables con una mayor autonomía. Modelos rivales como el Mercedes GLE o el BMW X7 ofrecen unidades más modernas con hasta 110 kilómetros de rango en las versiones híbridas enchufables de mayor capacidad. El problema de Porsche reside en una plataforma que no ha sido diseñada para albergar baterías de gran formato, aunque seguro que a los de Stuttgart se les ocurre alguna solución que les acerque a sus más inmediatos enemigos.
Michael Schätzle, el principal responsable de la familia Cayenne, reconoce que están trabajando en una de las actualizaciones de producto más intensas en la historia de la compañía. Gran parte de la atención se está destinando a realizar mejoras en el chasis del coche sin que por ello el Cayenne pierda capacidades dinámicas, de confort o como todoterreno, espacio donde se desenvuelve con bastante soltura a pesar de lo que las apariencias puedan indicar. Tal y como confirma el manager de producto, el nuevo Cayenne contará con un chasis semiactivo que alterará su respuesta en función del tipo de conducción.
El cambio de diseño también será destacado, aunque las líneas generales y las proporciones se mantendrán. De puertas para dentro, se sumará un nuevo paquete de pantallas con el último sistema operativo de la casa. El tamaño de los paneles crecerá, así como el número de funciones que estos pueden presentar. El nuevo Cayenne también será el primero en estrenar los faros HD-Matrix LED que se convertirán en estándar dentro de la marca y que dentro de poco empezarán a usar el resto de modelos de la gama.
El lanzamiento oficial está programado para la primavera de este mismo año. La gran cantidad de cambios estructurales está obligando al equipo de desarrollo a realizar duras pruebas en cuatro continentes. Más de 200.000 kilómetros por unidad de pruebas que simulan condiciones extremas de uso en apenas unos meses. Del calor más extremo al frío helador pasando por las carreteras del sur de España. Todo escenario sirve para que el Porsche Cayenne no solo mantenga sus conocidas habilidades, sino para que las mejore.
