El precio del cobalto, una materia primera esencial para las baterías de iones de litio de vehículos eléctricos (y todo tipo de dispositivos electrónicos), ha subido un 64 por ciento desde principios de año. El repunte de precios se originó cuando la Oficina de la Reserva Estatal de China anunció que aumentaría sus reservas de cobalto para garantizarse el suministro ante el auge de ventas de vehículos eléctricos.
En una etapa histórica predominada por las baterías, el cobalto se ha erigido como una de las materias primas más cotizadas en la actualidad. Es un material fundamental para las baterías de iones de litio presentes en todo tipo de dispositivos electrónicos y en los coches eléctricos, y garantizarse el suministro no es sólo importante por una cuestión económica sino también geopolítica.
El precio de cobalto ha superado la barrera de los 52.500 dólares por tonelada en la Bolsa de Metales de Londres, su cotización más alta desde diciembre de 2018. Es prácticamente un 64 % más que a principios de año, cuyo precio se situaba en 32.000 dólares/tonelada. No obstante, la cotización actual está muy alejada de sus máximos históricos (en marzo de 2018), cuando llegó a superar los 95.000 dólares por tonelada.
Cotización del cobalto (precio en dólares por tonelada).
Tras dos años con precios relativamente estables a lo largo de 2019 y 2020, a principios de este 2021 la cotización del cobalto empezó a subir. El repunte de los precios fue consecuencia del anuncio de la Oficina de la Reserva Estatal de China, que comunicó planes para almacenar cobalto y aumentar las reservas del país debido al auge de las ventas de vehículos eléctricos en China (y en Europa, lo que hace que haya otro competidor pujando por el preciado material). El pasado mes de enero, la producción de baterías de China aumentó más del 300 % interanual.
Otro de los factores que ha propiciado un aumento en el precio ha sido la dificultad para exportar este mineral desde sus lugares de origen. La pandemia del Covid-19 ha ralentizado el tránsito de mercancías, algo que también afecta a la cadena de suministro del cobalto. Un problema acusado en la República Democrática del Congo, que produce dos tercios del cobalto mundial, al que se suma la inestabilidad política que vive el país centroafricano.
Según Gregory Miller, analista de Benchmark Mineral Intelligence en Londres, «las empresas chinas siguen enviando hidróxido de cobalto a China desde África, pero se han producido retrasos que han contribuido a crear tensión en el mercado». China es el mayor importador mundial de cobalto: compra unas 95.000 toneladas al año. Cerca del 70 por ciento de todo el cobalto extraído en el mundo se transporta desde la República Democrática del Congo y China a través de los puertos de Sudáfrica, que el pasado mes de enero fueron cerrados en un intento por contener la expansión del coronavirus.
En febrero se reabrieron los puertos en Sudáfrica, lo que debería mejorar la disponibilidad de cobalto y rebajar el precio. No obstante, los analistas prevén que la oferta de cobalto seguirá siendo escasa en los próximos meses, lo que unido a una demanda creciente de baterías, hará que la tendencia del precio del cobalto siga en aumento en el corto plazo.