Adelantado años atrás como modelo conceptual, la sueca Koenigsegg se ha mantenido en silencio trabajando sobre la versión de producción del Gemera hasta que la ha tenido completamente lista para su presentación como modelo de producción. A decir verdad, no obstante, se ha mantenido en gran medida el diseño tanto exterior como interior del concept, así como la parte técnica, aunque incluye una sorpresa.
Los cambios que se han llevado a cabo en términos estéticos para esta versión de producción residen en la incorporación de espejos retrovisores convencionales, en lugar de cámaras. También hay un paquete opcional aerodinámico que incorpora un divisor delantero de mayor tamaño, el denominado S-Duct (un conducto en forma de 'S' en su frontal), un alerón trasero y varios cambios más aerodinámicos.
Si bien en principio fue presentado con un novedoso motor de 2 litros de cubicaje y tres cilindros, como uno de los principales actores de su cadena cinemática, la marca ha visto oportuno sumar a la oferta su ya conocido propulsor de 8 cilindros en formato de 'V' y 5 litros de capacidad.
Ambos motores de gasolina se complementarán con el que, sin duda ninguna, es la gran novedad y el principal reclamo tecnológico del Gemera: el Dark Matter. Así es como denomina Koenigsegg al pequeño motor eléctrico que aporta nada menos que 600 kW al conjunto. Empaquetado en una carcasa compuesta por fibra de carbono forjada, este motor es capaz de ofrecer 815 CV de potencia nominal, mientras que sólo suma al conjunto un total de 20 kilos. Una cifra ridícula para la potencia que consige generar.
Dependiendo de la configuración mecánica por la que se opte, el cliente podrá disfrutar de dos cifras de potencia muy distintas, aunque ambas igualmente estratosféricas. En ambos casos, alimentando al Dark Matter, habrá una batería de 14 kWh de capacidad.
El sistema híbrido que menor potencia rendirá será el que toma el motor de 2 litros como punto de partida. Comercialmente, se denomina TFG (las siglas de Tiny Friendly Giant) y la potencia conjunta llega hasta los 1.400 CV (1.030 kW).
La especificación más potente es la que hace uso del V8 de doble turbo procedente del Koenigsegg Jesko y, tal y como indica el propio Christian Von Koekigsegg, se trata del coche de producción más potente de la actualidad. Con este motor, denominado HV8, la potencia conjunta llega hasta los 2.300 CV (1.700 kW). Tampoco deja de impresionar su par motor, de 2.750 Nm.
La marca tiene previsto dar comienzo a la fabricación en serie del Gemera a finales de 2024. Con ello, las entregas a los clientes deberían arrancar en algún punto de 2025. Dado lo exclusivo de su concepto y lo limitado del alcance del Gemera por su precio, tan sólo se fabricarán 300 unidades a razón de 1,7 millones de euros la versión de tres cilindros y de 2,1 millones la V8.