Las compañías automovilísticas han visto una alta rentabilidad en los coches eléctricos y una demanda mayor a la esperada. Es por ello, que las principales marcas han incrementado sus apuestas en este sentido y el gasto total se situaría en torno a 1,2 billones de dólares hasta 2030 para el desarrollo y producción de vehículos eléctricos. Dicha inversión incluye también sus propios componentes, como baterías o la adquisición de materias primas fundamentales.
El pasado año 2021, Reuters realizó un primer estudio al respecto. En este dejaron claro que las estimaciones de inversión por parte de las marcas y empresas relacionadas con los automóviles sería de alrededor de 600 mil millones de dólares. Dicho estudio ha sido revisado recientemente para actualizar los datos. No obstante, la nueva cifra apunta a que se quedaron cortos en la estimación, puesto que el total de inversión se habría duplicado en apenas un año.
Siguiendo los propios pronósticos de los principales fabricantes de coches del mundo, la estimación es que para el año 2030 se fabricarán en torno a los 54 millones de vehículos eléctricos a batería, lo que representará el 54% de la producción total de vehículos en el mundo. Como respaldo a dicho nivel productivo, los fabricantes y sus respectivos socios especializados en la fabricación de baterías, esperan obtener un total de 5,8 TWh de capacidad anual en dichos componentes, según han publicado en Benchmark Mineral Intelligence.
A la cabeza de la lista se posicionaría Tesla, la firma norteamericana con uno de los mayores pronósticos de crecimiento a nivel mundial. El plan que el propio Elon Musk hizo público de cara a futuro propone la fabricación de 20 millones de vehículos eléctricos para el año 2030. Ello llevará a la necesidad de producir alrededor de 3 TWh anualmente en capacidad de baterías, lo que se presenta como todo un desafío para la marca y para la industria.
Esta capacidad productiva general (entre coches y baterías) para Tesla supondría multiplicar por 13 su fabricación actual, ya que se estima que para este año 2022 la compañía pueda alcanzar -o acercarse- a los 1,5 millones de coches eléctricos producidos. Ello llevará a la compañía a invertir varios cientos de miles de millones de dólares.
No obstante, otros grandes fabricantes del sector automovilístico también poseen enormes planes de crecimiento e inversión de cara a la próxima década. El Grupo Volkswagen estaría posicionado como segundo en la lista (por detrás de Tesla) con más de 100 mil millones de dólares destinados al desarrollo de sus coches eléctricos, construir o adaptar sus fábricas de Europa y América y adquirir suministros necesarios en forma de materias primas.
La siguiente compañía en este particular ranking es Toyota Motor. El grupo coronado por la propia Toyota está invirtiendo más de 70 mil millones de dólares en tal apartado. Sus pronósticos hablan de vender en torno a 3,5 millones de eléctricos a batería para el 2030. Para entonces, esperan contar con una gama de hasta 30 modelos "cero emisiones" en todo el conglomerado de marcas.
Seguidamente se encuentra Ford, con más de 50 mil millones de dólares en inversión. Los norteamericanos apuntan a fabricar hasta 3 millones de eléctricos en 2030, lo que supondría la mitad de su volumen total actual. Mercedes-Benz habría destinado 47 mil millones de dólares a tal efecto, mientras que BMW, Stellantis y General Motors presentan una inversión individual de 35 mil millones de dólares.
