El Coradia iLint, un tren eléctrico propulsado por hidrógeno, ha sido sometido a una prueba de viabilidad en Holanda, para comprobar si es factible el empleo de esta tecnología cero emisiones en lugar de los contaminantes y ruidosos trenes diésel. Las pruebas se realizaron el pasado mes de marzo, en un pista de 65 kilómetros en la provincia de Groningen, entre la localidad que le da nombre y Leeuwarden. El informe de resultados publicado considera que el tren de pila de combustible es una "alternativa totalmente viable" a los modelos diésel.
El equipo de pruebas, confeccionadas por el instituto Dekra, una entidad europea independiente fundada en Berlín en 1925 dedicada a la inspección de vehículos, ha tenido en cuenta cuatro puntos principales para evaluar el comportamiento del Coradia iLint: la sencillez y facilidad de la operación de repostaje, su viabilidad económica y comercial, la familiarización del público con la tecnología, y su adaptación al servicio comercial y al calendario para circular en la red ferroviaria holandesa, que ha sido certificada por la NSA (National Safety Assessor).
Arriva, el operador de la línea en la que se han realizado las pruebas asegura que el Coradia iLint ha cumplido puntualmente con el horario de paradas, tanto cuando el convoy se detiene en todas las estaciones, como cuando se emplea como un servicio express que realiza recorridos más rápidos. "El consumo de hidrógeno, la compatibilidad de la infraestructura, la aceleración, el frenado, el atraque en las estaciones, la velocidad máxima, el rendimiento de los servicios auxiliares y todas las operaciones se desarrollaron sin problemas".
Los resultados positivos del informe no suponen una sorpresa. En Alemania, el Coradia iLint ya está realizando servicios regulares en la Baja Sajonia. "Después de Alemania, los Países Bajos son el segundo país de Europa donde el tren de hidrógeno de Alstom ha demostrado ser una solución libre de emisiones para líneas no electrificadas", ha declarado Bernard Belvaux, Director Gerente de Alstom Benelux.
Dos de las unidades del Coralia iLint, entregadas en Alemania.
A pesar de este informe tan favorable, las autoridades de la provincia de Groningen y el operador Arriva, además del administrador de infraestructura ferroviaria holandés ProRail y la compañía energética Engie, que formaron parte de estas pruebas, tienen que decidir si el tren de celda de combustible reemplazará al diésel en la región y cuándo lo hará.
Las 40 unidades pedidas del primer tren movido por pila de combustible de hidrógeno por la Autoridad de Tránsito de Baja Sajonia y la Asociación Regional de Transporte del Rin montarán baterías suministradas por el proveedor alemán Akasol, según se anunció en enero de este año. Estas baterías alimentan sistemas de a bordo como la iluminación y el aire acondicionado, aunque su tarea principal es apoyar al sistema de propulsión en las fases de recuperación de velocidad. Cada unidad del Coradia iLint está equipado con dos sistemas de baterías de alto rendimiento cuya capacidad total es de 220 kWh. Con este sistema de suministro de energía mixto, se garantiza que los motores rindan correctamente cuando se solicita la máxima potencia de ellos. Además, las baterías también almacenan la energía eléctrica recuperada por el sistema de frenado regenerativo.
Otros proyectos de ferrocarriles movidos por hidrógeno
En Reino Unido está en marcha un proyecto financiado por el gobierno y desarrollado por Porterbrook y el Centro de Investigación y Educación Ferroviarias (BCRRE) de la Universidad de Birmingham, que ya han comenzado a probar el tren de hidrógeno HydroFLEX.
Proyecto HydroFLEX.
El último desarrollo que se ha anunciado relacionado con esta tecnología lo está llevando a cabo la empresa española Talgo. Las jornadas SOI H2, celebradas en septiembre, sirvieron como escenario para la presentación del primer prototipo de un sistema de pila de combustible de hidrógeno para la plataforma Vittal de Cercanías y Media Distancia y que, gracias a su modularidad, permite su instalación en cualquier tipo de tren.