La empresa israelí REE, creadora de la plataforma eléctrica que lleva a su máxima expresión la tecnología de los motores en rueda, ha mostrado su tecnología en un vídeo en el que tres prototipos de diferentes tamaños y especificaciones se desplazan sobre una pista con algunos obstáculos. Las tres plataforma se mueven de manera autónoma puesto que, sobre ellas no hay ningún tipo de cabina, solo los sistemas de conducción autónoma y las cámaras de grabación.
Los tres prototipos están diseñados para representar diferentes casos de uso: un vehículo de entrega de última milla de 1,3 toneladas, un minibús de 2,5 toneladas para el transporte de pasajeros, y una furgoneta de reparto de 4,5 toneladas diseñada para uso en el mercado estadounidense.
Las imágenes dejan ver el enorme potencial que abre esta tecnología que supone un cambio radical en la manera de generar los vehículos y una racionalización del proceso de diseño y producción para la industria automotriz, que podría llegar a las carreteras con diferentes 'caras', logotipos, formas y capacidades técnicas.
El chasis creado por REE da como resultado una plataforma plana y modular en el que todas las funciones básicas, dirección, suspensión, motor, transmisión y frenado, están agrupadas en las 'unidades de esquina', que son extraíbles y reemplazables, junto con las ruedas. Cada uno de estos módulos incorpora los componentes electrónicos para que cada función pueda controlarse por cable, sin necesidad de una unión mecánica con el volante o con los pedales, que pueden situarse en cualquier lugar de la plataforma.
Ante esta configuración, se abre un gran campo para el diseño de vehículos diferentes, proporcionando además una reducción en los tiempos de desarrollo y en los costes generales del vehículo, tanto desde la fase previa a su producción como en esta. Además, la posibilidad de controlar todos los sistemas mediante circuitos electrónicos y cables, también permite enviarle instrucciones en remoto, lo que facilita la incorporación de futuros sistema de conducción autónoma, que podrán incluirse a posteriori sin necesidad de modificar el chasis.
El chasis plano y los componentes de propulsión, dirección y frenado en las ruedas dan lugar a un chasis plano que facilita la utilización del espacio. Foto: REE.
Casi cualquier vehículo de cuatro ruedas que pueda imaginarse podría basarse en esta plataforma. La batería en el piso, plana y de grandes dimensiones reproduce la arquitectura tipo patinete de otros fabricantes, proporcionando opciones de diseño casi ilimitadas. En el mercado actual no hay un chasis tan plano que ofrezca tanto espacio montar sobre él una cabina y los componentes de control. En resultado es que puede ser un turismo, una furgoneta, una pick-up, un camión de reparto de diferentes dimensiones, un autobús, un vehículo de reparto automatizado o, incluso, un todoterreno.
Las unidades de esquina, extraíbles independientemente al resto del vehículo, permiten modificar las características mecánicas y las especificaciones del vehículo sin sustituir la cabina. Además pueden aceptar todo tipo de tecnologías, como por ejemplo una suspensión activa con altura variable, dirección a las cuatro ruedas, diferentes potencias y par motor, sistemas de control de par vectorial, dos o cuatro ruedas motrices, etc. REE puede incluir diferentes sistemas gracias a una red de suministradores de componentes del más alto nivel: YB, Musashi, NSK, American Axle, Mitsubishi y otras empresas con las que la compañía está colaborando para que desarrollen componentes específicos para estos módulos.
Tres plataformas y usos: un vehículo de entrega de 1,3 toneladas, un minibús de 2,5 toneladas y una furgoneta de reparto de 4,5 toneladas. Foto: REE.
La modularidad de estas unidades supone facilitar enormemente la reparación de averías o la realización de labores de mantenimiento. Tan solo es necesario retirar algunos pernos para extraer la parte sobre la que se está actuando, sustituirla por una unidad de repuesto y, mientras, reparar la avería o realizar el mantenimiento en el taller.
A falta de las pruebas reales de viabilidad técnica, funcional y de durabilidad, y de la aprobación por parte de las entidades encargadas de las homologaciones, algunos de los principales fabricantes de automóviles se han mostrado muy interesados por este sistema notablemente flexible y práctico. Uno ejemplo de esta situación es el memorando firmado por REE y Mahindra para desarrollar vehículos eléctricos aprovechando esta plataforma y la ingeniería, la capacidad de abastecimiento y los activos de fabricación bien establecidos del fabricante indio.
Esta tecnología, que fue mostrada en julio de 2019 en el Salón del Automóvil de Tokio ha sido desarrollada en colaboración con Hino Motors, un fabricante de camiones y autobuses que forma parte del grupo Toyota. La inspiración ha sido el concepto modular FlatFormer que permite configuraciones de carrocería plug-and-play optimizando el espacio interno del vehículo o su uso para aumentar el tamaño de la batería.