El Renault Austral es el nuevo SUV compacto de Renault, un coche con el que la marca francesa ataca de lleno al segmento más vendido en nuestro país y uno de los más populares de Europa. El Austral sustituye al Renault Kadjar y lo mejora en todo. Cambia de nombre porque es completamente nuevo, tanto por fuera como por dentro; a nivel de motorizaciones y de tecnología. Tendrá una gama completamente electrificada, se fabrica íntegramente en España y ya hemos podido probar la versión híbrida más potente.
El Renaut Austral es un SUV compacto de 4,51 m de longitud, que apunta directamente al corazón del segmento más vendido en España, el de los C-SUV. Un segmento en el que hay rivales tan duros como el Hyundai Tucson, el Kia Sportage, el Peugeot 3008 o el Nissan Qashqai, con el que este Renault Austral comparte plataforma y algunas de sus tecnologías, aunque Renault ha apostado en este caso por una opción diferente a la hora de elegir las motorizaciones.
Renault no ha arriesgado mucho con el diseño exterior, pero ha hecho un coche atractivo en términos generales (bajo mi punto de vista, y esto siempre es muy subjetivo). Si tuviera que destacar algunos puntos, destacaría la firma lumínica trasera con sus grandes pilotos en forma de C; el músculo de las aletas traseras; y las nervaduras de su capó, que tiene una superficie muy esculpida y trabajada. También la parrilla frontal, con múltiples "puntos" simulando una especie de constelación.
El sistema multimedia es el protagonista en el interior, aunque no es lo único bueno
Y si por fuera el cambio es muy notable, en el interior es todavía mayor. No sólo da un gran salto cualitativo respecto al Kadjar, sino que el Austral apunta por méritos propios a estar entre los mejores de su categoría. Al menos en el acabado 'iconic Esprit Alpine' que hemos probado, el más alto de la gama.
El Renault Austral se coloca en la parte alta de su segmento gracias a un diseño muy cuidado, buenos acabados y a la utilización de materiales de alta calidad percibida como el ante (Alcantara) en asientos, volante, puertas y salpicadero; o las molduras de aluminio que envuelven los altavoces del sistema de audio Harman Kardon. Aunque quizá una de los aspectos más destacables del interior es su pantalla central vertical, que incorpora uno de los mejores sistemas multimedia de la industria del automóvil a día de hoy.
Renault lo llama OpenR link y me vais a permitir por un momento no entrar en los detalles de cuántas pulgadas tiene la pantalla o cuánta memoria RAM tiene el sistema. Lo voy a simplificar: la pantalla es lo suficientemente grande para que sea cómodo pulsar donde quieres incluso yendo en carretera, tiene buena resolución y una respuesta rapidísima. No hay un atisbo de lag. Además, tiene un manejo un intuitivo, a pesar de ofrecer una multitud de ajustes y opciones. Dicho de manera muy resumida, está entre los dos mejores sistemas multimedia de cualquier coche de la actualidad y categóricamente superior a todos los que hay en su segmento.
El "truco" está en que el sistema multimedia lo ha desarrollado Google. El navegador, por ejemplo, es Google Maps. El asistente de voz es Google Assistant, es decir, funciona mejor que la mayoría de asistentes de voz de otros coches. Basta decir "Okey, Google" y atenderá solícito nuestras demandas siempre y cuando no excedan las posibilidades del coche. Quiero decir, no irá a tu puesto de trabajo por ti, pero sí te ayudará si le pides que busque un parking cercano, que envíe un mensaje a alguien o si le preguntas cuál es el gentilicio de Arroyo de la Miel. Por cierto, Renault ha mantenido botones físicos (de muy buen tacto) para los mandos del climatizador, un punto muy a favor en cuanto a ergonomía y seguridad.
Tiene también Google Play para descargar aplicaciones que pueden integrarse perfectamente en el sistema de infoentretenimiento. De serie viene con Spotify integrado, una app que ya forma parte de nuestro día a día para la mayoría de nosotros. Pero desde la tienda de Google se pueden descargar más, igual que harías con tu móvil. Si después de manejar el sistema nativo todavía echas en falta Android Auto o Apple Carplay, no te preocupes: tiene conectividad inalámbrica con ambos.
No todo es el sistema multimedia. Tenemos también un cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas con menús configurables: podemos ponernos el navegador en primer plano y la información en los laterales (velocidad a la izquierda, datos de viaje a la derecha, por ejemplo) o uno más tradicional. También tiene un Head-Up Display con lo más esencial: velocidad instantánea, indicaciones del navegador y límite de velocidad de la vía.
En términos de practicidad, Renault ha optado por poner un reposamanos en la consola central que sirve para poder manejar la pantalla teniendo la mano apoyada. Junto al reposamanos tenemos un hueco para dejar la llave-tarjeta y el cargador inalámbrico para el teléfono móvil. Además, toda la pieza del reposamanos y el cargador inalámbrico se desliza dejando al descubierto bien una pequeña guantera, bien dos reposavasos.
En cuanto a amplitud, el Austral se puede considerar correcto, en un punto medio entre su categoría. La banqueta de asientos trasera es deslizable (160 mm) de manera que podemos variar la capacidad del maletero entre 430 y 500 litros, dependiendo de si queremos más espacio para las rodillas o más espacio para el maletero.
Hasta aquí todo iba bien pero no todo podía ser perfecto y el Austral tiene un detalle que no me ha convencido: la posición de la palanca de cambios. Está a la derecha detrás del volante, justo por encima de la palanca de los limpiaparabrisas. Pero es que hay en total 3 palancas a la derecha del volante, junto con el mando satélite para el control del sonido. Demasiadas en tan poco espacio, lo que da lugar a que la palanca del cambio esté muy cerca del mando del limpiaparabrisas. Es muy fácil ir a meter marcha atrás y activar los limpias.
Mecánicas electrificadas con etiqueta ECO y hasta 200 CV de potencia
Hablemos de la parte técnica. La gama del Renault Austral estará totalmente electrificada, es decir, sólo habrá versiones híbridas y microhíbridas. Todas ellas con etiqueta Eco de la DGT. Nosotros hemos probado la versión híbrida de 200 CV de potencia, el Austral E-Tech full hybrid 200.
Su sistema híbrido combina un motor gasolina 1.2 Tce de 131 CV, dos motores eléctricos, una batería de 2 kWh de capacidad y una sofisticada transmisión sin embrague ni sincronizadores. Tiene 4 relaciones para el motor de gasolina y 2 dedicadas para el motor eléctrico impulsor, pero la combinación entre ellas da lugar a un total de 15 relaciones de transmisión diferentes.
El sistema E-Tech funciona esencialmente como en el Arkana, el Clio o el Captur híbridos que ya conocíamos y hemos explicado en más de una ocasión. De los dos motores eléctricos, uno sirve para generar corriente, arrancar el motor de combustión y para igualar la velocidad entre el cigüeñal del motor y la velocidad de las ruedas (por eso no necesita sincronizadores al uso). El motor eléctrico más potente tiene 50 kW (68 CV) y sirve para impulsar el coche cuando circula en modo eléctrico o híbrido, es decir, este sí es capaz de mover el coche por sí solo. Dice Renault que en ciudad, el Austral E-Tech híbrido puede circular en modo eléctrico cerca del 80% del tiempo.
Todo eso es la teoría. En la práctica tenemos un sistema que podríamos calificar como muy eficiente. Homologa un consumo combinado de 4,5 litros cada 100 km (ciclo WLTP), el más bajo de su categoría. En la primera toma de contacto no podemos extraer consumos con precisión exhaustiva, pero en una conducción mixta se mueve fácilmente por debajo de los 6 litros/100 km. Nada mal para un coche de 200 caballos y casi 1.600 kilos de peso. Sirva otra referencia como muestra: haciendo una conducción bien alegre, el consumo quedó en 7,5 litros.
Que sea eficiente no está reñido con unas prestaciones solventes. De hecho, la recuperación 80-120 km/h la completa en 5,6 segundos, un registro bueno. Como ocurre en muchos híbridos, dependiendo del modo de conducción la respuesta del acelerador a veces tiene algo de lag: es el tiempo que el sistema tarda en pensar cuánto esfuerzo pone el motor de combustión, cuánto el eléctrico y en qué momento. Este lag varía bastante dependiendo del modo de conducción: en Eco es más acusado y en Sport se reduce, con una respuesta más inmediata.
Además de su mecánica híbrida, otro de los puntos fuertes del nuevo Austral es su chasis y el sistema 4Control, o lo que es lo mismo, el eje trasero direccional. Es el único C-SUV con este sistema (aunque es opcional) y lo cierto es que aporta ventajas tanto en ciudad como en carretera.
A baja velocidad, las ruedas traseras giran hasta 5º en dirección contraria a las ruedas delanteras. El radio de giro es inferior al del Renault Clio, un coche mucho más pequeño, lo que facilita las maniobras en espacios estrechos. Y en carretera, las ruedas traseras giran en la misma dirección para aportar mayor estabilidad en el paso por curva. Además, en el modo de conducción Perso ("personalizable") puedes ajustar en varios niveles el sistema 4Control para que gire más o menos las ruedas, y por tanto te ayude más o menos a "redondear" las curvas.
Esto se une con una dirección que tiene mejor tacto que en el Kadjar, menos artificial y con más peso, y también más directa. La suspensión es confortable pero cuando subes el ritmo en curvas, contiene bien los movimientos de la carrocería y hace buena pareja de baile con el sistema 4Control. Está bien insonorizado a nivel aerodinámico y, en la mayor parte del tiempo, también del motor térmico. Aunque cuando este se pone a cargar la batería con el coche parado, se revoluciona bastante y llega bastante ruido e incluso bastantes vibraciones al interior. El funcionamiento en marcha es suave y los cambios entre el motor de combustión y eléctrico son poco perceptibles.
Precios del Renault Austral E-Tech en España
En el momento de su lanzamiento habrá una mecánica híbrida (HEV) de 200 CV y dos versiones micro híbridas de 140 y 160 CV. Las versiones híbridas sólo se pueden combinar con los acabados techno e iconic, mientras que las micro híbridas se pueden elegir con equilibre (acabado de acceso) y techno. Los dos acabados más altos, techno e iconic, se pueden elegir con la línea de equipamiento deportiva "esprit Alpine", que añade elementos como las llantas de 20", logos Alpine en el interior, asientos en Alcantara y piel, pespuntes en color azul y Alcantara en volante, salpicadero y puertas, entre otros equipamientos específicos. Sí, utilizar el nombre Alpine aquí puede ser polémico pero no son los primeros (léase AMG Line en Mercedes) y seguramente no serán los últimos en hacer este tipo de maniobra de marketing.
El nuevo Renault Austral arranca en 30.900 euros para la versión Austral equilibre mild hybrid de 140 CV. Las versiones híbridas E-Tech full hybrid tienen un precio a partir de 39.600 euros. A continuación se detallan los precios de la gama Austral en España.
- Austral techno E-Tech full hybrid 200 CV: 39.600 euros
- Austral techno esprit alpine E-Tech full hybrid 200 CV: 40.600 euros
- Austral iconic E-Tech full hybrid 200 CV: 42.600 euros
- Austral iconic esprit alpine E-Tech full hybrid 200 CV: 43.600 euros
Versiones micro híbridas:
- Austral equilibre mild hybrid 140 CV: 30.900 euros
- Austral equilibre mild hybrid 140 CV: 32.900 euros
- Austral techno mild hybrid 140 CV: 33.400 euros
- Austral techno mild hybrid 140 CV automático: 35.400 euros
- Austral techno esprit alpine mild hybrid 160 CV automático: 37.400 euros
Conclusiones
El nuevo Renault Austral es probablemente, como producto, el coche más redondo de Renault en mucho tiempo. En mi opinión, es también el mejor SUV de Renault hasta la fecha, y eso que el Captur puso el listón alto. Son muchos atributos para hacerse con el público y cuesta encontrarle pegas, más allá de la posición de la palanca del cambio y un maletero ligeramente más pequeño que el de algunos rivales.
No es barato, pero ninguno de sus rivales lo es: el Hyundai Tucson 1.6 TGDI híbrido de 230 CV arranca en 35.125 euros; el Kia Sportage 1.6 HEV hace lo propio en 36.681 euros; el Nissan Qashqai e-Power parte desde 36.100 euros; el Toyota RAV4 Hybrid 220H cuesta 39.000 euros; el Alfa Romeo Tonale Super Hybrid 130 TCT cuesta 36.250 euros; el Peugeot 3008 arranca en 35.050 euros con motor PureTech 130 de gasolina; y el Volkswagen Tiguan parte desde 37.685 euros con motor 1.5 TSI de gasolina y 130 CV (etiqueta C).
El nuevo Austral tiene uno de los mejores sistemas multimedia del mercado (incluyendo marcas premium y de lujo), si no el mejor, un apartado que cada vez tiene más peso entre los clientes. Y la versión híbrida consume muy poco, así que cuida del bolsillo del cliente. Todas las versiones tienen etiqueta ECO y el nivel de acabados, materiales y diseño están un peldaño o dos por encima que antes, una estrategia de Renault para posicionar más alto tanto el Austral como sus futuros modelos. Y todo ello con el sello de 'fabricado en España', desde la producción del motor y la caja de cambios hasta el ensamblaje final.
