Mucho antes de llegar al mercado ya está siendo uno de los coches que más noticias está generando. Europa pelea por hacer del coche eléctrico un sistema de movilidad real y barato para todos. El objetivo está lejos con los precios actuales y por ello las marcas anuncian grandes planes para fabricar coches eléctricos pequeños y asequibles. Renault está generando mucho ruido en torno a sus lanzamientos. Los franceses quieren recuperar sus modelos icónicos, primero con el Renault 5 y más adelante con el Renault Twingo. Si bien el primero está a punto de llegar al mercado, el segundo y más barato está teniendo más problemas. El proyecto puede haberse encarrillado ante la aparición de un nuevo socio.
Luca de Meo, CEO de Renault, siempre ha asegurado que su compañía tiene la receta del éxito para hacer viables y rentables los coches eléctricos más pequeños. Sin embargo, en un extraño movimiento de generosidad, desde el principio ha buscado un socio con el que compartir el tremendo gasto que ello supone. En los últimos meses, en Europa, han surgido numerosos rumores sobre la posible creación de un Airbus en el sector de la automoción. Una empresa conjunta europea, en un principio formada por Stellantis, Volkswagen y Renault, para crear coches eléctricos baratos para todo el continente y así contrarrestar los movimientos y la llegada de productos procedentes de China.
China sale al rescate, aunque Renault no da detalles de quién será su socio
Sin embargo, las negociaciones, promovidas por el Gobierno de Francia, no han tenido el resultado que todos esperaban. Rápidamente, Stellantis se bajó de ese carro, dejando a Volkswagen y a Renault con las conversaciones. Durante unas semanas ambas empresas parecían entenderse, pero, finalmente, hace unos días el propio de Meo confirmaba que era imposible llegar a un acuerdo. Volkswagen buscará sus propios medios para desarrollar un supuesto ID.1. El plan, ya confirmado, es lanzarlo al mercado en 2027 con un precio de partida inferior a los 20.000 euros. Todo se quedará en casa pues serán los alemanes los que se encarguen de todo el trabajo.
Renault, en cambio, siempre ha apostado por la fórmula de compartir y tras el rechazo de los alemanes ha surgido un gran grupo muy interesado en la alianza. Renault ya ha confirmado que tendrá un socio con el que poder desarrollar el Twingo de menos de 20.000 euros. No ha querido dar detalles de este importante socio que, como era de esperar, es chino. Muchas miradas apuntan a BYD por la más que repetida y estrecha colaboración que ha unido a ambas marcas. La última es el desarrollo de motores y sistemas híbridos a través de Horse, su empresa conjunta en Europa, Horse. Sin embargo, esta teoría no tiene mucha fuerza.
Ya ha quedado demostrado que BYD quiere hacerse con el mercado del Viejo Continente. Con coches enchufables pretende colonizar todos los segmentos del mercado, incluyendo el de los coches eléctricos baratos. Su apuesta es el BYD Seagull que llegará este mismo año. No tendría sentido que BYD colaborase en un proyecto que atenta directamente contra una de sus más prometedores lanzamientos. Dentro de esa carpeta de rumores y posibles alianzas, Xiaomi también ha sido otra de las posibles asociaciones que se han generado en torno a Renault. Hace tiempo que de Meo confirmó las negociaciones con Xiaomi y Li Auto para unir fuerzas. Nada se ha sabido sobre ello, pero lo que sí está claro es que el Renault Twingo ya tiene el socio que esperaba y los planes incluyen un desarrollo y una producción en suelo europeo. Ahora sólo queda saber quién es ese misterioso amigo chino.
