Rock Tech Lithium ha anunciado la construcción de la primera fábrica de hidróxido de litio para baterías en Europa. Más concretamente se ubicará en Guben, Brandenburgo, una localización que no es fruto de la casualidad ya que se encuentra apenas a 120 kilómetros de la nueva fábrica de Tesla en Grünheide.
La región de Brandenburgo está dispuesta a convertirse en los próximos años en un importante núcleo de la industria de los coches eléctricos. Rock Tech Lithium será uno de los nuevos actores en esa escena con la construcción de una planta destinada a la producción de hidróxido de litio para baterías de coches eléctricos. El plan es producir unas 24.000 toneladas de hidróxido de litio al año, cifra suficiente para unos 500.000 coches eléctricos.
Rock Tech Lithium es una empresa germano-canadiense que también extrae la materia prima de unas minas que tiene en Ontario (Canadá). En la nueva fábrica de Alemania se dedicará a refinar estos recursos minerales y dejarlos listos para la fabricación de celdas de batería de ion-litio. La compañía invertirá 470 millones de euros en esta nueva fábrica, donde creará 160 puestos de trabajo, cuya finalización está prevista para el año 2024. No obstante, la empresa ha detallado explícitamente que la materialización del proyecto también depende de las subvenciones por parte de la Administración pública alemana.
Hidróxido de litio. Imagen: Rock Tech Lithium.
En un comunicado Rock Tech Lithium asegura que estuvo buscando y deliberando el emplazamiento de esta fábrica por toda Europa y elegió Guben por su «larga tradición industrial y las infraestructuras existentes». Lo cierto es que la ubicación elegida no está elegida a la ligera: la nueva Gigafactoría de Tesla en Grünheide está a unos 120 kilómetros de distancia y en ella no solamente se fabricarán coches, también celdas de baterías. Y no sólo eso: también a unos 120 kilómetros, esta vez hacia el suroeste, se encuentra la fábrica de cátodos de BASF (en Schwarzheide, concretamente). El director general de la compañía quiere posicionar a Rock Tech ante todo como proveedor de litio para la industria del automóvil, pero, según Handelsblatt, también está buscando conversaciones con especialistas en cátodos para otras industrias y aplicaciones.
El director general de Rock Tech, Dirk Harbecke, en declaraciones a Handelsblatt aseguró que «Brandenburgo será una de las primeras regiones de Europa en cubrir casi toda la cadena de valor de los coches eléctricos». Si bien es cierto que el litio para la fábrica procede de la mina de Canadá, todo lo demás está cubierto: desde el procesamiento de las materias primas hasta la construcción de los coches eléctricos, pasando por el reciclaje. «Nuestro objetivo es ser la primera empresa del mundo en crear un circuito cerrado para el litio».
De aquí a 2030, Rock Tech Lithium tiene previsto obtener alrededor del 50% de las materias primeras a partir del reciclaje de las baterías usadas. Según Harbecke, la demanda [de vehículos eléctricos y, por ende, baterías] es «gigantesca», razón por la cual una fábrica podría quedarse corta. Tanto es así que la compañía tiene previsto anunciar la construcción de cinco fábricas en Europa.
Según las previsiones de la Comisión Europea, se estima que la demanda europea de litio para baterías de coches eléctricos se multiplicará por 18 para 2030 y en hasta por 60 para el año 2050. De ahí que tener un suministro y una cadena de valor propias (reduciendo la dependencia de Asia y América) cobre cada vez mayor importancia estratégica a nivel económico y geopolítico.