Ejercer de máximo responsable de cualquier empresa supone estar tomando constantemente decisiones que marcan una a una el devenir de la compañía. En el sector del automóvil, como la gran industria que es, los directos ejecutivos de cada fabricante dibujan estrategias que de llevar a la marca a buen puerto, tienen grandes recompensas.
Que un alto cargo de un fabricante de primer nivel tenga un sueldo millonario, en realidad, no es nada nuevo, pero sin duda sí es noticia que Toyota haya adjudicado a su CEO el bonus de mayor cantidad hasta la fecha, según el periódico japonés Nikkei, de lo que se hace eco Automotive News Europe.
Y es que el directivo marcó años atrás el camino a seguir por la compañía con sus coches híbridos y una cartera de productos global para hacer las mínimas adaptaciones por cada mercado. El resultado de esto es que Toyota es actualmente, por volumen, el segundo mayor fabricante de coches del mundo y sólo entre los 10 coches más vendidos del mundo 5 son modelos de la firma japonesa.
En realidad Akio Toyoda (Nagoya, 1956) dejó su cargo el pasado año, cediendo su silla a Koji Sato (1969, Tokio), pero el ya ex-directivo de la marca debía cobrar todavía la compensación por haber dado alcance a los objetivos fijados.
El bonus que Toyoda ha ingresado ya en la cuenta y que ha supuesto todo un récord para Toyota ha sido de 10,06 millones de dólares, que teniendo en cuenta el cambio actual de la moneda supone estar hablando de un bonus de casi 9,3 millones de euros, situándose gracias a este pago como el mejor pagado de la industria del automóvil, (con permiso de Elon Musk el próximo año) y como el sexto directivo japonés con el salario más alto.
Sin salir de las filas de Toyota, también recibió su compensación anual el nuevo CEO de la compañía, Sato, quien recibió un bonus millonario aunque no tan alto como el de su predecesor, de 3,88 millones de dólares, que se traducen a 3,58 millones de euros.