Esta semana ha sido noticia la llegada de una actualización técnica para los Tesla Model S y Model X que permitirá aumentar la autonomía de las versiones Long Range hasta alcanzar 610 y 505 kilómetros respectivamente. Pero lo más relevante de la noticia no son los resultados, sino cómo Tesla ha conseguido mejorar la autonomía de sus coches eléctricos sin ampliar la capacidad de sus baterías.
Tanto la nueva versión del Tesla Model S como la del Model X que salen de Fremont en la actualidad han sido retocadas para ofrecer una mayor eficiencia energética y sacar el máximo partido a sus baterías. Así pues, con el mismo paquete de 100 kWh que equipan estos modelos en sus versiones más capaces, se obtiene una eficiencia mayor a 93%, una cifra insultantemente superior al 45% que son capaces de obtener algunos motores de combustión en el mejor de los casos.
¿Cómo ha conseguido Tesla mejorar la eficiencia de sus coches eléctricos?
En las últimas semanas, justo antes de que Tesla llevase a cabo el evento Autonomy Day, se hablaba con mucha fuerza de la posibilidad inminente de que la compañía californiana actualizase los Model S y X con algunos elementos de nueva generación desarrollados específicamente para la llegada del Model 3 al mercado.
Finalmente esto se ha hecho realidad, y tal como asegura el fabricante en su blog, sus vehículos eléctricos recibirán mejoras en el tren propulsor. Las mejoras son el resultado de la combinación de un "nuevo motor de reluctancia síncrona e imán permanente, electrónica de potencia de carburo de silicio y otras mejoras en la lubricación, refrigeración, y diseños de los engranajes y rodamientos".
También se ha mejorado la recarga rápida y la respuesta de la suspensión
Por otro lado, el proceso de recargar la batería de los coches eléctricos de Tesla llevará menos tiempo que nunca. Gracias a que serán compatibles con los nuevos Supercharger V3, los Tesla Model S y X de nueva generación podrán absorber electrones a una potencia máxima de 200 kW. En las estaciones Supercharger existente, llamadas V2, estos vehículos eléctricos podrán realizar la recarga a hasta 145 kW en lugar de 120 kW. Según Tesla, esto representa una mejora del 50% en las velocidades de carga.
Además de esto, la suspensión también se ha actualizado con "amortiguadores totalmente adaptables, lo que da una sensación ultra confortable". Tesla asegura que las nuevas suspensiones se adaptarán constantemente al comportamiento del conductor y a las condiciones de la carretera, "se suavizarán automáticamente en los tramos de carretera más constantes y se reafirmarán para una conducción agresiva".