Tesla ha dado comienzo a la contrucción de su propia planta de refinería de litio. El objetivo, conseguir que los coches eléctricos que fabrica la firma americana acaben portando una química de baterías que tenga un mineral que ha sido previamente tratado por ellos mismos.
La ubicación elegida para levantar esta nueva planta de procesado está en el estado americano de Texas, en las afueras de la ciudad de Corpus Christi.
La marca ha dado el pistoletazo de salida a los trabajos de construcción de la fábrica con un acto celebrado in situ y presidido por Elon Musk. Al acto han acudido distintas personalidades de la industra y representantes locales.
Aunque la razón de ser pasa por tratar el litio que acabe llegando a las baterías de sus modelos, lo cierto es que Tesla ha puntualizado que no tiene pensado dejar de trabajar con suministradores externos del material, ni siquiera para cuando esta planta de nueva factura se encuentre trabajando a pleno ritmo.
"Tenemos la intención de seguir utilizando proveedores de litio, así que no es que Tesla vaya a hacerlo todo", ha comentado el máximo responsable de la marca, desmarcándose así de la visión de fabricantes como BYD, que controlan la total producción de sus coches, incluido el tratamiento de materias primas.
Increasing lithium refining capacity is critical to a sustainable energy economy—today, we're breaking ground on our in-house lithium refinery outside of Corpus Christi, TX.
— Tesla (@Tesla) May 8, 2023
This facility will also prioritize the elimination of a challenging refinery byproduct (sodium sulfate).… pic.twitter.com/mBnDBLNrW7
En el futuro, esta instalación también tendrá entre sus actividades principales la eliminación de sulfato de sodio, un problemático subproducto fruto del refinamiento del litio.
Son varias las ventajas que conlleva disponer de una planta propia de procesado de litio. Musk apunta a que la más evidente es no formar parte de una cartera de clientes que se tienen que repartir el litio que trata una compañía especializada en ello, por lo que, en situaciones de desabastacimiento o baja disponibilidad, no habrá problemas.
En este sentido ha comentado: "Si miramos unos años más adelante, un punto de estrangulamiento fundamental en el avance de los coches eléctricos es la disponibilidad de litio para baterías".
Por otro lado, con un proyecto de este tipo se logran abaratar de manera mayúscula los costes de producción y, dado que pretenden ponerla en funcionamiento para 2025, se baraja la posibilidad de que el litio que se trate en esta planta es el que acabe llegando a su modelo más asequible, un producto que aportaría a la marca un margen de beneficios más reducido y en el que, por tanto, tiene lógica que quieran ahorrar costes de producción.
En más de una ocasión, Musk ya ha declarado que las refinerías de litio son auténticas máquinas de "imprimir dinero". Ahora parece decidido a comprobarlo en persona.