Toyota utilizará el escaparate que supone el CES de Las Vegas para presentar su próximo vehículo autónomo. El P4, como se conoce al prototipo, se ha basado en el Lexus LS500h y, según la compañía, supone "un gran paso adelante" ya que mejora la potencia del modelo. Gracias a la tecnología de quinta generación que incorpora el LS, que aporta mejorías en el chasis, la firma nipona explica en un comunicado que los movimientos del nuevo vehículo serán más suaves en el modo autónomo.
El P4 se utilizará como vehículo de pruebas para el desarrollo del modo Guardian and Chauffeur
El prototipo P4 se utilizará como vehículo de pruebas para el desarrollo del modo Guardian and Chauffeur, el sistema de conducción autónoma de Toyota. De hecho, uno de los objetivos de la compañía es eliminar el conductor humano de sus vehículos. "La introducción de la nueva plataforma P4 nos ayudará a acelerar el desarrollo de la conducción humana cuando se una a nuestra flota esta primavera", aseguró Ryan Eustice, uno de los responsables del Toyota Research Institute que está trabajando en el P4.
La compañía nipona también ha anunciado avances gracias a su acuerdo con la tecnológica CALTY. Toyota ha explicado que las cámaras se integran mejor en el diseño del vehículo gracias a la tecnología de la firma con sede en Michigan (EEUU) y al aumento de las cámaras adicionales para mejorar los tiempos de reacción. También se añadirá un sensor de imágenes tanto en la parte delantera como en la trasera.
El prototipo P4 de Toyota incorpora nuevos sensores de imágenes.
Toyota afirma que también se ha mejorado el aprendizaje del P4 gracias a una configuración más potente de la consola. Ese "cerebro" del vehículo se aloja verticalmente contra el respaldo de los asientos traseros y se libera así espacio en el interior de la cabina. Las mejoras del P4 comenzarán a implementarse en modelos LS500h a partir de la próxima primavera.
