Hace casi dos años, Apple presentó su nuevo sistema de conexión móvil en vehículos. En aquel momento, la nueva generación del CarPlay no llegó exento de polémicas, ya que la función se alejaba de su propósito inicial (crear un mero vínculo entre el coche y el smartphone) y se apropiaba de la práctica totalidad de sistemas del vehículo; desde la instrumentación hasta el resto de pantallas de información y entretenimiento.
Esto no sentó bien en el sector de las marcas automotrices, ya que estas afirmaron que invertían millones de dólares al año en el desarrollo de dichos sistemas, por lo que no les parecía bien que Apple terminase integrando su propio ecosistema por encima del de la propia marca.
No obstante, Apple no se ha dado por vencida. Hace apenas unos días se llevó a cabo la Conferencia de Desarrolladores de la compañía (conocida por sus siglas WWDC). En dicho certamen se dan lugar los principales avances o novedades referentes a los sistemas operativos de sus dispositivos. Y Apple CarPlay también ha tenido su espacio.
Apple quiere más autoridad sobre el sistema de los coches
Como novedad principal en esta nueva actualización, el sistema Apple CarPlay podrá hacer uso y gestión de la climatización del vehículo, pero también de otros elementos que hasta ahora le eran vetados, como acceso a los modos de conducción o la configuración de los asistentes de conducción.
Apple, consciente de los ‘peros’ que ocasionó ya la versión anterior, ha abierto la veda a que los fabricantes puedan diseñar sobre este sistema sus propias interfaces o personalizar los aspectos que crean convenientes. De esta manera, esperan cosechar un mayor número de marcas que se vinculen a este sistema.
Pero, ¿habrá algún fabricante dispuesto a integrar el nuevo Apple CarPlay en su sistema multimedia? Actualmente únicamente dos marcas de vehículos han dado el ‘sí’ al entorno de Apple: Porsche y Aston Martin. Estas ya firmaron un acuerdo con la compañía de Cupertino hace unos meses, aunque aún está por desvelar cómo integrarán sus funciones en sus vehículos.
Por otro lado, Tanya Kancheva, ingeniera jefe de la división Car Experience de Apple, afirmó lo siguiente: “Los automóviles han cambiado mucho desde que se lanzó CarPlay por primera vez (en 2014), con pantallas más grandes y muchas más funciones. A la gente le encanta llevar sus aplicaciones favoritas del iPhone al coche. Los usuarios de nuestro dispositivo tienen la opción de utilizar esta próxima generación de CarPlay que proporciona contenido para todas las pantallas”.
La responsable continuó: “Ahora ofrece una interfaz totalmente integrada para una experiencia más fluida, consistente y rica en funciones posible, una experiencia que también se adapta perfectamente a la configuración específica de su vehículo. Es lo mejor de tu coche combinado con los mejores patrones de interacción de tu iPhone”.
¿Comenzará a verse ahora la verdadera expansión del nuevo Apple CarPlay?
Todo indica que así podría ser. Marcas como Ford también se han interesado por las nuevas características y funcionalidades de Apple CarPlay. No obstante, habrá que esperar hasta la confirmación oficial por parte de nuevas compañías. De momento sólo es oficial su llegada a las ya mencionadas Porsche y Aston Martin.
Contrariamente, sí se ha popularizado más la integración del sistema Android Automotive en algunas firmas automotrices, como Polestar o Renault, entre otras. El motivo principal para ello podría ser la, hasta ahora, mayor capacidad de personalización del sistema del robot, sobre una Apple más capada en este sentido. No obstante, la nueva capacidad de esta última podría tomar la delantera en los próximos años o, al menos, equiparar a su mayor competidor.