Hasta ahora, el coche eléctrico más asequible de Volkswagen era el Up, un pequeño vehículo de apenas 3,6 metros de longitud que ya llevaba en el mercado una docena de años. El pequeño vehículo de Volkswagen inició su comercialización en 2011 como sucesor espiritual del Volkswagen Fox. Su formato era ideal para que, en 2014, la marca decidiera poner en el mercado una variante eléctrica con una batería de 18,7 kWh de capacidad, perfecto para la ciudad y que en 2019 aumentó hasta los 32,2 kWh.
Según datos revelados por Autocar, la fábrica de Bratislava, Eslovaquia, donde se producía hasta ahora, tanto con mecánica de gasolina como eléctrica, da por concluida la vida útil del coche. Así, el modelo más accesible a la gama eléctrica de la firma germana desaparece sin un sustituto claro a medio plazo, sino que este tardará en llegar, al menos, otros tres años. En ciertos mercados, como Alemania, Francia o Reino Unido, todavía hay disponible alguna unidad de stock, aunque en España, lamentablemente, no hay existencias.
El primer coche eléctrico 'del pueblo'
El Volkswagen e-Up salió a la venta en el año 2014 como variante cero emisiones del modelo equipado con mecánica térmica, que había visto la luz unos años antes. Este adoptaba un motor eléctrico de 61 kW (82 CV) y 210 Nm alimentado por una batería de 18,7 kWh. Esta conjunción le proporcionaba una autonomía eléctrica de hasta 160 kilómetros. Unos años más tarde, en 2019, recibió una actualización que lo dotó de una mejora sustancial en sus cifras, alcanzando ahora los 250 kilómetros de rango gracias a una batería con el doble de capacidad.
El Volkswagen e-Up formaba parte de la familia de vehículos denominados ‘New Small Family’ (NSF) del Grupo Volkswagen. Junto al modelo alemán también se lanzaron versiones replicadas por marcas como SEAT, con el Mii Electric, y Skoda con el Citigo-e iV.
A pesar de sus limitadas cifras y especificaciones, los tres vehículos han gozado de unas ventas notablemente generosas. En España, el que más triunfó fue el de SEAT, pues su precio se situaba por debajo de los 20.000 € gracias a las ayudas y descuentos establecidas en aquel momento. Esto, unido a sus pequeñas cotas, lo hacía ser un coche ideal para desplazamientos urbanos en ciudades como Madrid o Barcelona.
Sin embargo, el Volkswagen e-Up se marcha sin un relevo a la vista. Este puesto lo ocupará el esperado Volkswagen ID.1 que aún tardará en llegar, ya que no se espera que inicie su comercialización hasta, al menos, el año 2027. Al igual que el e-Up!, se espera que su sustituto espiritual cuente con un precio de partida de alrededor de 20.000 euros, posicionándose así por debajo del ya conocido Volkswagen ID.2. No obstante, debido a que la firma alemana actualmente se encuentra haciendo modificaciones en sus nomenclaturas, es posible que finalmente estos puedan llegar con otros nombres más comerciales e históricos en la marca, dando continuidad, por ejemplo, a la saga del Polo.