Autodenominado como el Rey de los Compactos, el Golf es uno de los coches más importantes de la historia y de Volkswagen. Este año ha cumplido 50 años de vida. Cinco décadas en las que ha mostrado a todo el mundo el camino a seguir. Con ocho generaciones diferentes presentadas, los alemanes se preparan para el futuro. La novena generación será completamente nueva, de los piés a la cabeza. Será, una vez más, uno de los coches más importantes en la historia, pues será el coche que lance a Volkswagen al estrellato eléctrico, o en su defecto, la entierre. En Wolfsburgo se toman muy en serio su desarrollo y no quieren dejar nada al azar.
No es ningún secreto que a Volkswagen no le han salido las cosas como esperaba. Los alemanes se las prometían muy felices con su gama ID eléctrica, pero la realidad es que no han demostrado ser mejores que la competencia. La debilidad comercial se ha extendido al resto de la gama, incluyendo a una octava generación del Golf que no cumplió con las expectativas. Si bien las ventas han sido correctas, no han sido extraordinarias. Europa y el resto del Mundo vive una época de transición, de cambio a lo eléctrico, pero no lo suficientemente consolidada como para olvidarse de la combustión o lo tradicional.
Estructura de 800 voltios y más de 600 km de autonomía
En más de una ocasión Volkswagen ha asegurado que quiere volver a ser la Volkswagen que todos recordamos, y eso pasa por hacer del Golf una pieza clave y revolucionaria. Será el primer coche de la alianza en usar la plataforma SSP (Scalable System Platform). Una súper estructura que ya está en desarrollo y que aglutinará los mejores conceptos y cualidades de las plataformas ya presentes. Todas las marcas del grupo trabajarán en el desarrollo, incluyendo Rivian. Alemanes y americanos han firmado un acuerdo de colaboración, previo pago de 5.800 millones de euros, por el que Rivian ayudará con sus conocimientos y tecnologías.
“Hemos decidido cómo queremos realizar el vehículo definido por software. Esto sucederá con Rivian, la empresa conjunta en la que estamos armando la nueva arquitectura de electrónica eléctrica. Pero también decidimos que queríamos comenzar este viaje con un producto icónico. Así que empezaremos con el Golf”, explicó el jefe de la marca VW, Thomas Schäfer, en una entrevista con Automotive News. Se presentará en 2028, aunque no llegará al mercado hasta el año siguiente. El plan se ha retrasado 15 meses, pero no pasa nada. Los alemanes aprovecharán ese tiempo para mejorar las características, implementando los nuevos conocimientos adquiridos de Rivian. Posteriormente la plataforma SSP se extenderá al resto de marcas del grupo.
La importancia es vital para el futuro de la compañía. Se espera que la novena generación del Golf sustituya al ID.3, que no ha tenido buena acogida, aunque para el 2026 se esperan “enormes mejoras” en toda la gama ID. En cuanto a cifras, se espera que el Golf eléctrico supere ampliamente la barrera de los 600 kilómetros de autonomía. La estructura, de 800 voltios, permitirá elevadas potencias de carga, hasta 300 kW en corriente continua con baterías de 80 kWh de capacidad. La potencia superará la barrera de los 400 caballos y se espera que las medidas se mantengan en cotas actuales, en torno a los 4,3 metros de largo.