El segundo de los componentes de la familia eléctrica de Volkswagen, el ID. Crozz, ya rueda, aunque camuflado, por las carreteras, realizando las habituales pruebas previas al lanzamiento de la versión definitiva de producción. Previsto para ser lanzado al mercado a lo largo de 2020, el ID. Crozz se incluye en el segmento más demandado actualmente por los compradores, el de los SUV eléctricos de tamaño medio, por lo que tiene asegurada una dura pelea por conquistar el liderazgo de uno de los segmentos más importantes para la cuenta de resultados del fabricante.
Presentado en abril de 2017, durante la celebración del Salón de Shanghái, el ID. Crozz únicamente se había mostrado de forma estática, como un prototipo, en sucesivos salones. Una segunda versión, más elaborada y ya con algunos cambios fue mostrada al público en el Salón del Automóvil de Frankfurt de 2017. Ahora ha sido capturado realizando pruebas de funcionamiento bajo un camuflaje que, sin embargo, sí permite adivinar sus formas básicas.
We've waited two years to see it in the flesh, but @UKVolkswagen's new ID Crozz electric SUV has finally hit the road in prototype form. What do you think? https://t.co/gNspvk0yYJ pic.twitter.com/UdiW88pkQ3
— Autocar (@autocar) July 29, 2019
El ID. Crozz no ha recibido todavía el nombre definitivo con el que se comercializará, aunque es de suponer que estará formado por las letras "ID" seguidas del número correspondiente a su segmento y formato, de acuerdo con los nombres registrados por Volkswagen en noviembre de 2018. Se construirá en Europa, Estados Unidos y China, consolidando su estatus como un modelo verdaderamente global y un eje crucial del rápido despliegue de los vehículos eléctricos de la marca.
Diseño y versiones
El ID. Crozz se ofrecerá en dos versiones de carrocería diferentes. Hasta ahora, el que se ha mostrado como prototipo en los diferentes salones se corresponde con la versión SUV cupé, pero también estará disponible en una versión SUV, que es la que ha sido capturada durante las pruebas, con un diseño mucho más convencional, marcado por un techo más horizontal y un portón trasero completo. En las imágenes capturadas se puede adivinar que la versión de producción perderá las puertas traseras correderas que hasta ahora mostraba el concepto de 2017.
El diseño del frontal del concept presentado en Shanghái se actualizó unos meses después en el prototipo mostrado en Frankfurt, con un nuevo frontal que según Herbert Diess, CEO del Grupo Volkswagen, se acerca más a la versión de producción definitiva.
Mecánica
El Volkswagen ID. Crozz concept mide 4.625 mm de largo, 1.891 mm de ancho y 1.609 mm de alto, con una distancia entre ejes de 2.773 mm. Estas dimensiones lo ubican entre el tamaño de un Tiguan de cinco plazas y un Tiguan AllSpace de siete asientos. Se basa en la plataforma modular eléctrica MEB del Grupo Volkswagen con un tren motriz formado por dos motores eléctricos situados cada uno en un eje. El delantero ofrece una potencia de 75 kW (101 CV) y 140 Nm de par y el trasero 150 kW (201 CV) y 310 Nm de par. Ambos estarán alimentados por una batería de 83 kWh situada en el piso del vehículo que le dotaría de una autonomía de 500 kilómetros.
Volkswagen aumentará en aproximadamente 100 CV la potencia total que ofrece el ID.3, con el objetivo de compensar el considerable aumento de peso. Sin embargo, con la batería alojada en el piso del vehículo y los motores eléctricos en los ejes, Volkswagen afirma que ha logrado repartir de forma casi perfecta este peso (48:52) lo que aumenta la seguridad y la comodidad y asegura una grandes cualidades dinámicas. Además el ID. Crozz llegará preparado para ofrecer la opción de ser conducido de forma manual o autónoma.
Plan de electrificación
"En 2020, nuestro objetivo es vender 100.000 vehículos eléctricos cada año", afirmó Diess en la presentación del concept en 2017. "Pero eso es solo el comienzo, en 2025, nuestras ventas anuales aumentarán 10 veces hasta alcanzar el millón de vehículos anuales"
Con el acuerdo alcanzado por la Unión Europea para reducir un 37,5% el CO2 emitido por los coches nuevos en el año 2030, Volkswagen decidió acelerar sus planes de electrificación e invertir 30.000 millones de euros en los próximos cinco años para reducir las emisiones de su gama.