La división de componentes del grupo Volkswagen, Volkswagen Group Components, invertirá 3.800 millones de euros hasta 2023 en la producción de componentes de movilidad eléctrica (motores eléctricos y sistemas de batería), con 870 millones tan solo entre 2019 y 2020.
Volkswagen Group Components, que ejerce como nueva marca del consorcio automovilístico alemán desde el pasado 1 de enero, prevé registrar además un ahorro de costes de 2.000 millones de euros para 2025, gracias a una reargonización de la compañía, a un mayor impulso de su suministro interno y al aprovechamiento de sinergias.
La firma, para la que trabajan unos 80.000 empleados en todo el mundo repartidos en 61 factorías, ya logró ahorros de costes por 750 millones de euros en sus plantas de Alemania entre 2016 y finales de 2018.
"Estamos aprovechando los efectos de la eficiencia en nuestras áreas de negocio actuales y alineando Volkswagen Group Components de manera orientada al futuro con nuevas actividades en el campo de la movilidad eléctrica. La nueva organización garantizará que se promueva la creación de redes entre las plantas", señaló el consejero delegado de Volkswagen Group Components, Thomas Schmall.
La marca de componentes del consorcio alemán tiene un posicionamiento "independiente", con un consejo de administración formado por tres miembros: Thomas Schamall, como presidente; Thomas Eichenberg, como responsable de Finanzas, y Wolfgang Fueter como responsable de Recursos Humanos.
El equipo de administración también incluye a los jefes de las áreas de negocio recientemente organizadas, que se extienden a lo largo de varias plantas y que son: motor y fundición, caja de cambios y transmisión eléctrica, chasis, asientos y movilidad eléctrica.
Por su parte, Stefan Sommer, miembro del consejo de administración del grupo Volkswagen y responsable de Compras, también se integra en el consejo de vigilancia de Volkswagen Group Components.
La multinacional germana subraya que el cambio de los motores de combustión interna a una movilidad eléctrica perjudica más a su unidad de componentes que al resto del grupo, ya que, por ejemplo, en 2018 produjo más de diez millones de propulsores convencionales y más de ocho millones de cajas de cambios.
No obstante, Volkswagen Group Componentes ya desarrolla y produce motores eléctricos y sistemas de batería para distintas marcas del grupo y aumentará "enormemente" estas capacidades en los próximos años, subrayó Schmall.
Asimismo, la compañía ha desarrollado una estrategia para incrementar la producción de sistemas de propulsión eléctrica, que implementará en cooperación con Audi, Porsche, Volkswagen y otras marcas del consorcio alemán.
"Los motores convencionales seguirán siendo importantes en los próximos años. Los componentes de los vehículos, como motores, cajas de cambios, sistemas de dirección, ejes y asientos, son los pilares de nuestro éxito. Con nuevas actividades en el área de movilidad eléctrica y nuevas asociaciones estratégicas, garantizaremos un futuro exitoso para nuestra cartera de productos", sentenció Schmall.