Volkswagen España ha reunido en el ID. House de Madrid a toda la familia eléctrica de la marca basada en la misma plataforma eléctrica MEB de la marca. Aprovechando esta reunión sin precedentes, la firma ha explicado su estrategia ACCELERATE que además de la electrificación completa supone un cambio radical hacia la digitalización, un aspecto tan importante que dará un giro completo al producto y a las diferentes líneas de negocio de la marca.
En el ID. House, Volkswagen ha reunido desde el único prototipo existente de ID. Life, en el que trabajan todavía los ingenieros de la marca hasta el ID. Buzz, la furgoneta eléctrica que hace revivir a la mítica T2 y que es el modelo más emocional de la familia. Entre ellos, el ID.3 y el ID.4, acompañados de sus variantes GTX (la reinterpretación de las clásicas siglas deportivas GTI), el nuevo ID.5, un SUV cupé que se empezará a comercializar en mayo y el ID.6, un modelo pensado para los gustos del mercado chino que no se venderá en Europa.
Producto y tecnología: Christoph Meyer
Para explicar en detalle la estrategia del Grupo Volkswagen y en especial de la marca alemana, estuvo presente en el evento Christoph Meyer, Jefe de Tecnología de la plataforma MEB y de la familia ID. Meyer hizo un repaso por toda la gama desde que en 2017 se anunció la inversión en electrificación y el desarrollo de la plataforma MEB específica para sus coches eléctricos que se adecuara a los gustos de sus clientes. Paralelamente, Volkswagen trabajó en el desarrollo del software que acompañará a todos sus coches y en la planificación de las Gigafactorías para fabricar los coches y sus baterías.
La gama se inició con el ID.3. El ID.4 que se lanzó un poco después. Este último es un producto especial con un rol muy importante puesto que se fabrica en diferentes variantes para todos los mercados mundiales. El ID.3, por ejemplo, no se vende en EE.UU y el ID.6 X/CROZZ únicamente se comercializará en China puesto que está creado y diseñado según los gustos de sus clientes allí.
Los dos últimos productos son el ID.5 que está a punto de entrar en producción y se entregará a los primeros clientes en pocas semanas y el ID. Buzz está haciendo su presentación mundial y entrará pronto en producción. A estos modelos, que ya son un hecho, se añaden dos prototipos como el ID. Life, el más pequeño de la familia y que buscará su espacio entre los coches urbanos y el Aero B, que estrenará una plataforma MEB actualizada capaz de ofrecer hasta 700 kilómetros de autonomía con mayor velocidad de carga.
Para poder hacer frente a la demanda de estos productos, el Grupo Volkswagen ha realizado una gran inversión económica para remodelar sus fábricas. Actualmente son seis las que están en activo fabricando coches eléctricos de la familia ID. en el mundo. Cuatro en Europa, Hannover, Zwickay y Dresde en Alemania y Miadá Bolesvac en la República Checa, dos en China Anting y Foshan. Está previsto que en poco tiempo la planta de Chattanooga, en Estados Unidos, arranque sus operaciones para producir la versión local del ID.4.
Volkswagen ha tenido en cuenta todo el ciclo de vida de los coches, desde la producción a su uso y reciclaje, para mantener su compromiso ecológico. Esta voluntad afecta a sus proveedores, con los que mantiene pactos para emplear electricidad verde para la producción de las celdas de las baterías de tracción. Ha implementado pasos similares en su producción para utilizar un 100 % de electricidad verde. Si los clientes utilizan también electricidad procedente de fuentes renovables es posible que todo el ciclo de vida del coche se complete sin apenas emisiones. Volkswagen ha logrado su objetivo de reducir aproximadamente tres toneladas de CO2 por vehículo de 2020 a 2021, un paso importante para lograr reducir el 40 % de sus emisiones en 2030 respecto a las declaradas en 2017.
Pero la electrificación es solo una parte de la transformación de Volkswagen. El software forma parte importante de él y es el responsable de que se pueda incluir en todo el ecosistema que tiene planteado la marca. La primera versión del software fue actualizada al ID. Software 2.3 el año pasado, permitiendo la funcionalidad OTA (actualizaciones over the air sin necesidad de pasar por el taller). En las dos campañas de actualización participaron 65.000 y 55.000 vehículos respectivamente. Esto permite mejoras y nuevas funcionalidades que pueden hacer más fácil la experiencia de uso.
Actualmente comienza la campaña de actualización al ID. Software 2.4 que requiere además un paso por el taller para cambiar la batería de 12 voltios. Esta actualización es imprescindible para pasar a la siguiente, el ID. Software 3.0, una actualización muy importante que ya implementará directamente el ID.5 de producción (y en el ID.3 y el ID.4 que se fabrican actualmente). Los aspectos destacados que incluirá son un aumento de la potencia de carga y la optimización del consumo de batería, un alimentación del sistema Travel Assist con datos del tráfico en tiempo real, una ampliación de la realidad aumentada del Head-up–display, un Park Assist con función de memoria, mejoras en el asistente de voz y el streaming de música con radio digital y mejora del sonido.
El mercado del coche eléctrico: Laura Ros, directora general de Volkswagen España
En 2017, Volkswagen anuncia su estrategia eléctrica con la transformación de su producto y de sus plantas, basada en la nueva plataforma MEB sobre la que se desarrolla toda la gama y su tecnología. El objetivo es que en 2030, el 70 % de sus ventas sean de coches eléctricos. Para ello ha comprometido 18.000 millones de euros para toda la transformación de los que 14.000 millones son para la ofensiva eléctrica. Otros 1.000 millones son para hibridación y los 3.000 millones restantes para el desarrollo de software y digitalización. El Grupo Volkswagen anunció una inversión de 89.000 millones de euros, 34.000 millones en electrificación.
El resultado es un aumento del 96,5 % de las ventas en 2021 por parte de Volkswagen, siendo la segunda marca más vendida con el ID.3 y el ID.4 en el top 5 de ventas. A nivel de grupo los números se repiten con 452.900 vehículos vendidos de los que 263.200 son de la marca Volkswagen. El grupo se sitúa como líder en el mercado europeo, en el top 2 en el estadounidense y multiplica por cuatro sus ventas en China. En el primer trimestre de 2022, Volkswagen ha vendido 53.400 unidades lo que supone un aumento de 73,7 % y el grupo en general ha matriculado 99.100 vehículos, un 65,2 % del total.
En España, Volkswagen logró una cuota de mercado de vehículos 100 % eléctricos del 2,8 % en 2021, y en 2022, según previsiones de ANFAC alcanzará el 4,4 %. El grupo completo en 2021 alcanzó una cuota del 9 %.
Volkswagen solicita un plan de ayudas más eficiente que se centre también en el canal de empresas, que impulse la infraestructura de recarga y que aporte una fiscalidad positiva. La infraestructura de carga en España sigue siendo muy deficitaria con 283 puntos de recarga por cada millón de habitantes con una cuota de mercado de eléctricos del 2,8 %. Dos decisiones políticas ayudarán a que la situación mejore agilizando los trámites. El nombramiento de los puntos de carga como de interés público y la posibilidad de poner en marcha un punto de carga únicamente con una declaración de responsabilidad.
El ecosistema We Charge facilita un ecosistema basado en una plataforma funcional que permita a los conductores viajar con tranquilidad con su vehículo eléctrico. En España se sustenta sobre tres pilares fundamentales. La red Ionity que ha renovado sus tarifas fijas para hacerlas más competitivas y que ya cuenta en España con 50 cargadores en 16 localizaciones (y otras 5 localizaciones en curso) con posibilidad de cargar hasta 350 kW de potencia. Además We Charge recoge otros 5.000 puntos de recarga con una cobertura del 95 % del territorio en carga de alta potencia (50 kW o más). Por último, el mayor porcentaje de las cargas para uso diario se realizan en casa con la carga vinculada que también forma parte de esta plataforma.
El compromiso industrial de Volkswagen con España se centra en la Gigafactoría de Sagunto en Valencia, que necesita la confirmación del PERTE para iniciar su producción en 2026. Junto a ella en 2030 estarán en marcha otras cinco instalaciones más. Dos de ellas ya tienen localización, en Suecia y Alemania, otra se situarán en el este de Europa y las otras dos están pendientes de las decisiones del Grupo.