El coche eléctrico más barato de Volkswagen costará entre 18.000 y 20.000 euros y estará disponible en cuatro años. Así lo ha confirmado el jefe de movilidad eléctrica del fabricante alemán, Thomas Ulbrich, quien además ha afirmado que la tecnología compleja que utiliza este tipo de vehículos eléctricos obligará a Volkswagen a comercializarlos con un precio superior a los 12.000 o 14.000 euros que suele costar un vehículo de combustión equivalente, como pueden ser el Volkswagen Up, el Skoda Citigo o el Seat Mii.
Volkswagen planea tener en el mercado su coche eléctrico económico en 2023, justo después de que haya lanzado al mercado el ID.3, su coche eléctrico compacto del segmento C. El más pequeño de la familia ID, hipotéticamente llamado ID.1, servirá de modelo de entrada a la gama eléctrica, pero todavía no podrá competir con un precio equivalente a las alternativas de combustión debido al coste elevado que tiene el sistema propulsor eléctrico y sus baterías, que lo encarecen un 30%.
"En los coches eléctricos urbanos será donde encontremos dificultades, principalmente porque utilizan un sistema propulsor muy caro que supone alrededor del 30 por ciento del precio del vehículo", dijo Ulbrich en declaraciones a Auto Express. "Los clientes de este segmento (el A) pagan hoy en día entre 12.000 y 14.000 euros por su coche, pero en el futuro tendrán que comprar un automóvil eléctrico del mismo segmento por una cantidad entre 18.000 y 20.000 euros. Ese será uno de los mayores desafíos a los que nos enfrentaremos en el futuro".
Los esfuerzos de Volkswagen para abaratar el coche eléctrico
Con el objetivo de conseguir reducir el coste de los coches eléctricos más asequibles de la marca, Volkswagen está en conversaciones con el gobierno de Alemania para solicitar mayores progresos en cuanto a los subsidios a la compra de este tipo de vehículos. "Tenemos que hablar con los gobiernos acerca de los subsidios al vehículo eléctrico", afirma Ulbrich, "cómo son las ayudas y cómo se distribuyen, pues la gente tiene derecho a tener coches eléctricos".
La otra vía para ofrecer al mercado coches eléctricos asequibles que puedan generar beneficios a la compañía es el mercado masivo. Volkswagen tratará de abaratar los costes de producción asociándose a otras marcas que quieran comercializar coches eléctricos basados en su plataforma modular MEB. "Ganar dinero vendiendo coches eléctricos no es sencillo, especialmente por el coste de las baterías, por lo que la única solución es vender con volumen", dijo Ulbrich. Cuando se le preguntó acerca de cuándo los vehículos eléctricos de Volkswagen serán rentables, el directivo afirmó que esperan "tener beneficios después de seis años".