Brekr es una startup con sede en Achterhoek, Países Bajos, que desarrolla y produce dispositivos relacionados con la movilidad personal, entre los que destaca un ciclomotor eléctrico que destaca por su diseño diferenciador. Recientemente ha asegurado una inversión de 1,5 millones de euros procedentes de Bloomit Ventures y Bloomit Seed que le permitirá expandir su negocio al resto de Europa más allá de su presencia actual en Países Bajos, Alemania y Bélgica
El as en la manga con el que Brekr quiere revolucionar los ciclomotores eléctricos en Europa es el Brekr Model B, que fue presentado en 2019 bajo el nombre de B4000 en el Civon Innovation Center un evento que se celebra en la misma localidad en la que la startup tiene su sede. Su diseño peculiar, elegante y actual le convierten "en el compañero urbano perfecto para los desplazamientos urbanos", según afirma la empresa.
Esta pensado como una alternativa sostenible y rentable a un ciclomotor o a un scooter convencional movido por gasolina, incorporando una serie de tecnologías que permiten disfrutar de una conducción divertida y funcional. El diseño de la Brekr Model B responde a la búsqueda de una nueva estética diferenciadora y a la practicidad y la lógica que requiere la colocación de los componentes de un tren de tracción eléctrico.
La eliminación del innecesario tanque de gasolina permite una estructura del cuadro de aluminio minimalista, muy liviana ya que pesa entre 10 y 30 kilogramos medio que un scooter de tamaño medio. Cuenta con ruedas de gran diámetro que eliminan mejor las irregularidades que las ruedas pequeñas. La suspensión delantera montada en la horquilla y la trasera, mediante un sistema propietario patentado, amortiguan las irregularidades en la superficie de la carretera. Su diseño cambia la típica posición de las barras para dejar espacio a los componentes del sistema de propulsión.
Brekr Model B.
El motor eléctrico, que desarrolla una potencia nominal de 2.500 W (y punta de 4.000 W) permite alcanzar una velocidad máxima de 45 km/h, la máxima que permite su homologación. Está situado en la rueda trasera dejando su espacio para colocar la batería lo más bajo posible para estabilizar el ciclomotor y facilitar la conducción.
En ese espacio que libera el motor se pueden colocar dos baterías, ambas extraíbles y portátiles, con un peso de 10 kilogramos y que la compañía garantiza durante 2 años. Cada una de ellas tiene una capacidad de 2 kWh, se recarga en cinco horas y es capaz de ofrecer una autonomía que va desde los 50 a los 80 kilómetros. Por lo tanto, la autonomía total, con las dos baterías cargadas está entre los 100 y los 160 kilómetros.
El ciclomotor cuenta con un módulo GPS y una conexión de datos que permite conectarse a ella en remoto mediante el teléfono móvil y una aplicación diseñada para ella. Proporciona información sobre los recorridos, la capacidad de la batería y también es un sistema de seguridad antirrobo puesto que ofrece la ubicación en tiempo real.
Niek van Exel, director de Bloomit Ventures, su nuevo inversor, asegura que "el objetivo de Brekr está en línea con nuestros conocimientos y expectativas futuras del mercado lo que la convierten en una inversión lógica".