Las motocicletas eléctricas de baja potencia son una potencial solución al transporte urbano en los próximos años. Con precios cada vez más equiparables al de sus homónimos de gasolina, los scooters y motos eléctricas de corte urbano aportan ventajas a considerar que no han de ser pasadas por alto, y una de ellas es sin duda el irrisorio consumo frente a otros medios de transporte y el coste que ello conlleva para el usuario.
En Híbridos y Eléctricos hemos podido analizar varias motos eléctricas equivalentes a 125 (homologación L3e), y además del pertinente análisis que hemos publicado en forma de prueba, también las hemos sometido a una prueba de autonomía.
En base a poder dar las cifras de autonomía de la manera más exacta posible y en la máxima igualdad de condiciones, todas ellas se han llevado a cabo exactamente en el mismo recorrido (en la ciudad de Málaga y sus alrededores), con sólo una persona sobre su asiento y bajo la premisa de gastar la totalidad de una batería de una sola vez.
Ecooter E2 Max.
La única variable que no ha podido cumplirse en todas ellas es la de la temperatura exterior. Por esto mismo en las épocas de más frío hemos llevado a cabo las pruebas a las horas de mayor temperatura y en verano en las de menos. No obstante, los resultados finales muestran que, efectivamente, las que probamos durante verano consumieron sustancialmente menos que las que probamos en invierno.
Estas son las motos eléctricas cuyos consumos hemos analizado
Las motos eléctricas cuya autonomía hemos explorado hasta el límite han sido la Wellta Ártica, la Super Soco TC Max y su hermana la CPX, la Ecooter E2 Max y la NIU MQi GT. Todas ellas con una potencia comprendida entre 3 y 4 kW (que equivale a entre 4,06 y 5,36 CV), una cifra que aunque se asemeje más a la de un ciclomotor, lo cierto es que todas ellas en la práctica muestran prestaciones más cercanas a las de una moto de 125, sobre todo en el campo de la aceleración, donde la balanza cae de su lado.
Lo habitual en motos eléctricas de esta potencia es que para su batería se recurran a módulos cuya capacidad rara vez supere los 3 kWh, pues la mayoría de ellas gozan de paquetes de 2,7 ó 2,88 kWh de capacidad, y con una carga completa cada fabricante promete autonomías que de entre 80 y algo más de 100 kilómetros.
NIU MQi GT.
Los resultados de nuestras pruebas de autonomía han dictaminado que un scooter o moto eléctrica con una potencia de 3 kW y batería de unos 2,8 kWh, con una persona de 75 kilos sobre ella, lo normal será promediar autonomías de entre 70 y 80 kilómetros con una carga completa.
Más concretamente, y enumeradas de menor a menor autonomía, las motos eléctricas que han pasado por nuestras manos han logrado recorrer 69 kilómetros en el caso de la Wellta Ártica (a su favor hemos de concretar que fue durante una ola de frío a finales del mes de febrero), 74,6 kilómetros en el caso de la Super Soco CPX con un sólo módulo de baterías, 81 kilómetros la NIU MQi GT, 89 kilómetros la Super Soco TC Max y de momento la que más ha logrado recorrer es la Ecooter E2 Max con 126,5 kilómetros recorridos, aunque con el paquete de baterías de mayor tamaño disponible (4,5 kWh) y en pleno mes de julio, siendo la que más temperatura disfrutaba durante su prueba.
El consumo de una moto o scooter eléctrico equivalente a 125
Cada una de las motos eléctricas que hemos probado, obviamente, ha arrojado una cifra de consumo distinta. Un consumo que en lugar de reflejarlo en kWh cada cien kilómetros, lo expondremos en kilómetros por cada kWh, para así reflejarlo con una cifra más homogénea.
- Wellta Ártica: 23,95 km/kWh
- Super Soco CPX: 25,90 km/kWh
- NIU MQi GT: 27,21 km/kWh
- Super Soco TC Max: 27,47 km/kWh
- Ecooter E2 Max: 28,11 km/kWh
Una vez ordenadas de menor a mayor, las cifras de consumo obtenidas arrojan que las motos eléctricas que mayores temperaturas han disfrutado durante sus pruebas son las que menos energía han precisado (excepto el caso de la TC Max). No obstante no se trata de buscar la que más o menos consuma, sino de saber qué consumo medio tiene una equivalente a 125 centímetros cúbicos, y qué coste conlleva para el usuario.
Super Soco TC Max.
El consumo medio obtenido teniendo en cuenta todas las pruebas de autonomía ha sido de 26,59 kilómetros por cada kWh consumido. Se trata, a nuestros ojos, de una cifra muy concluyente y realista, pues tiene en cuenta varios modelos y además en varias épocas del año, y aun así se muestran todos bastante parejos.
Entonces, ¿cuánto cuesta alimentar una moto eléctrica?
Con este tipo de motos eléctricas no se ha de recurrir a la infraestructura de carga pública, pues sus baterías extraíbles y el uso al que están destinadas imperan que se carguen sus baterías en casa de noche, mientras no se usan.
Como bien sabemos no hay un precio fijo para cada kWh consumido, y el precio del mismo dependerá de en qué momento del día carguemos la batería, y en base a ello dependeremos de las tarifas valle, llana o punta. Asumiendo que la mayor parte de las cargas se llevarán a cabo durante la noche, y que en esta se da el periodo valle, según el precio medio de varias fuentes, el coste de cada kWh se cifra en torno a los 0,147 céntimos (tomando varias fuentes como referencia).
La batería de la Super Soco TC Max tiene 3,24 kWh de capacidad, puede recorrer 89 kilómetros con ella completamente cargada y en el peor de los casos costará 0,71 euros cargarla.
Esto se traduce a que si somos capaces de cargar siempre la batería cargar por completo las baterías de las motos eléctricas que hemos probado, cada carga tendrá un coste de entre 39 y 66 céntimos de euros, lo que nos valdrá para recorrer entre 70 y 90 kilómetros.
Por contra si necesitáramos cargar puntualmente fuera del horario más favorable, el coste medio en estos momentos se sitúa en el entorno de los 0,22 céntimos, que para las motos eléctricas que hemos probado conllevaría un coste de entre 59 y 99 céntimos de euro para una carga completa. Incluso en este caso y dados los kilómetros que pueden llegar a recorrer, se trata de un coste mucho menor que el de un 125 centímetros cúbicos de gasolina.
