Hasta ahora, Honda no ha apostado inequívocamente por ofrecer en su oferta la posibilidad de elegir una motocicleta eléctrica que marque el inicio de una nueva etapa en la movilidad, más allá de algunas patentes que parecen indicar que están trabajando en ello. Precisamente, es otra patente del fabricante japonés relacionada con las motocicletas eléctricas la que sorprende por su extraña naturaleza. Se trata de una moto que viene acompañada de un dron incorporado en la parte trasera que la ayudaría en las labores de navegación, serviría para transportar baterías de repuesto cuando la moto se quede sin energía por un descuido de su piloto o como un curioso sistema de refrigeración del motor.
Honda parece que está todavía lejos de poder ofrecer su primer producto eléctrico. Su trabajo hasta ahora se limita al proyecto de un sistema de intercambio de baterías compartido con Yamaha, Kawasaki y Suzuki, a la Honda PCX e:HEV híbrida y a la Honda CB125R eléctrica que será, probablemente, su primera apuesta real, aunque por ahora queda mucho por hacer, puesto que todas las noticias se basan en patentes.
El dron supervisa la navegación y permite el avisar a las emergencias en caso de accidente.
Y es precisamente otra patente la que llama la atención, pero no únicamente porque en ella aparece una motocicleta eléctrica deportiva con carenado completo, sino porque la acompaña un dron situado en la parte trasera del asiento. Si bien, como ocurre en todas las patentes, esto no asegura que el departamento de I+D de Honda esté realmente trabajando ni en la moto ni en el dron, sí estimula la imaginación para saber que utilidad podría tener un dron en un vehículo como este.
La patente no entra en detalles el funcionamiento del sistema. Ni siquiera especifica cómo se realiza el manejo de este dron, que debería ser automático ya que el piloto no puede operar dos vehículos a la vez. Sí se centra, sin detallarlos, en los usos potenciales que podría aportar a la motocicleta y al piloto.
El dron aparece plegado cuando no está funcionando y se despliega para volar.
Al profundizar sobre los detalles que ofrece la patente, las imágenes muestran que el cuadricóptero se instala en el interior de una caja situada en la parte trasera. Inicialmente esta aparece cerrada, cuando no está funcionando, para permitir que su estructura quede dentro del ancho del vehículo. Cuando entra en acción, se abre y el dron despliega las hélices y despega desde la parte trasera para permitir que vuele libremente por delante de la motocicleta.
Sus funciones pueden ser variadas, entre ellas mejorar potencialmente la navegación ya que puede conocer lo que ocurre en la ruta planificada e informar al piloto en tiempo real de la existencia de tráfico o de algún peligro excepcional en la carretera. Además puede servir para avisar a los servicios de emergencia en caso de accidente o incluso para transportar una batería de recambio hasta el lugar en el que se encuentra la motocicleta en el caso de que se haya quedado sin energía. El dron también puede utilizarse como un sistema de monitorización visual para diagnosticar averías y también, cuando se encuentra acoplada a ella, como un sistema extractor del aire caliente del motor eléctrico que ayuda a la refrigeración.
El dron de Honda funcionaría como un sistema de refrigeración para el motor eléctrico de la motocicleta.
La patente indica que el dron "mejora la conducción del vehículo anfitrión" gracias a su potencial para colaborar con los sistemas de ayuda a la conducción, ya que permitiría prever los peligros que se puede encontrar por delante la motocicleta, aumentando la seguridad.