La empresa americana Droog Moto, con sede en el estado de Washington, ha presentado una nueva motocicleta eléctrica con un nombre bastante complicado, DM-017 V2 E-Fighter, en cuyo interior, muy escondida, hay una Zero DS totalmente personalizada. El sistema eléctrico formado por el motor eléctrico de Bosch, la batería y la electrónica, y el basculante trasero, es lo único que sobrevive a esta personalización extrema, cuyo resultado es una motocicleta eléctrica mucho más agresiva. Además, sobre la base inicial, puede personalizarse todavía un poco más para cada uno de los compradores, de manera que cada cliente tiene un modelo propio e irrepetible.
Droog Moto es una empresa especializada en motocicletas hechas a medida que crea a partir de modelos comerciales, sometiéndolos a una serie de modificaciones cuyo resultado final es otra motocicleta que, en la mayoría de las ocasiones, resulta irreconocible. Su catálogo no es precisamente el más extenso del mercado, de hecho tan solo cuenta con cuatro modelos: dos motocicletas de combustión urbanas Urban Fighters (014 y 015) y otras dos eléctricas, denominadas Fighters, ambas basadas en modelos de Zero Motorcycles. La que ya ofrecía con anterioridad, la 016 se basaba en una Zero FX. La nueva incorporación es la 017 (realmente Droog Moto DM-017 V2 E-Fighter) basada en una Zero DS, más potente que la anterior.
Encuentra las siete diferencias entre la DM-017 V2 E-Fighter y la Zero DS.
El proceso de personalización al que esta empresa somete a cada uno de sus productos hace que cada una de sus motocicletas sea diferente al resto. No hay dos motos de Droog Moto idénticas, ya que en cada una de ellas se incorporan las preferencias de cada cliente, que, por lo tanto, recibe una máquina única.
En el caso de la DM-017 V2 E- Fighter el cambio es tan radical que, salvo porque la empresa lo dice, nadie diría que es una Zero DS. Los cambios empiezan directamente desde las ruedas. Las llantas sólidas, sin radios, calzan unos neumáticos completamente adaptados a la práctica del todoterreno sustentados por una suspensión delantera con una horquilla mejorada y un basculante trasero que se mantiene del modelo de referencia. El exterior del resto de la motocicleta añade una serie de paneles de carenado completamente rediseñados, un asiento personalizado y un sistema de iluminación led nuevo, sobre todo por la posición de la luz delantera, situada detrás de la horquilla de suspensión y por las pequeñas franjas led traseras que se incrustan en el asiento.
Diseño del DM-017 V2 E- Fighter.
Los elementos más reconocibles heredados de la Zero DS son el basculante trasero y el motor eléctrico. Porque la configuración mecánica de este modelo sí se mantiene. El motor de 34 kW (46 CV) es capaz de alcanzar en la DM-017 V2 E- Fighter hasta 158 km/h, mejorando loa 139 km/h del original. Cuenta con varios modos de conducción seleccionables y personalizables e incluye un cargador de alta potencia que aumenta los tiempos de carga de la batería.
El precio de este diseño exclusivo se paga caro, porque arranca en nada menos que 40.000 dólares (unos 33.700 euros a, cambio), cuando la Zero DS de entrada cuesta tan solo 16.570 euros en la web europea del fabricante americano.