Analizando todas y cada una de las propuestas que son noticia en el sector de las motocicletas eléctricas que vienen desde fabricantes emergentes, casi la totalidad de ellas tienen en común que su atractivo se forja en torno a productos de corte asequible, ninguno realzando la imagen de marca premium sino que destacan la funcionalidad por encima de la calidad. No este es el caso de la propuesta de NAON; se llama Zero-one y es un estridente scooter eléctrico de alta calidad.
NAON es una compañía con sede en Berín, Alemania, y que pretende hacer de su scooter eléctrico uno de los primeros dentro de un segmento hasta ahora poco poblado, el de los scooters eléctricos premium. El NAON Zero-One destacará de primeras, sin duda, por su diseño, pero es una vez que nos fijamos en sus especificaciones cuando nos damos cuenta que se han tomado su esquema eléctrico tan en serio (o más) como su minimalista imagen.
La alta calidad en la concepción de la NAON Zero-One ha sido posible gracias a la que la mayoría de sus responsables provienen de grandes fabricantes de la industria, quienes han sabido, dicen acudir a la calidad en los pequeños detalles para hacer énfasis en la faceta premium del scooter eléctrico.
El carenado transparente es un elemento de equipamiento opcional en la NAON Zero-One.
La particularidad más llamativa en cuanto a la estética de la NEON Zero-One son sus proporciones. Reduce los paneles de la carrocería tanto como es posible, y el que es necesario que mantenga su tamaño, el carenado, para proteger al piloto de las inclemencias del aire, lo han hecho transparente para seguir ofreciendo esa imagen diáfana que el resto de la motocicleta ofrece.
Es a causa de su diseño por lo que no puede ofrecer la funcionalidad típica de un scooter de su potencia, ya que no consta ni de hueco portaobjetos tras el transparente carenado, ni tan siquiera se reserva sitio un rack de carga al que adaptar un baúl., aunque sí permite que bajo su asiento podamos alojar un casco de tipo jet.
En lugar de dotar a la Zero-One de todos los atributos prácticos que normalmente caracteriza a un scooter lo que han hecho es recurrir al minimalismo tanto como su faceta de scooter le ha permitido, dejando a la vista elementos esenciales de la parte ciclo como el manillar y el amortiguador trasero. Por su parte los grupos ópticos también se han reducido tanto como se ha podido, recurriendo a tiras de led tanto el el faro delantero como en las luces traseras.
En el perfil NAON Zero-One llama la atención el amortiguador trasero completamente al desnudo, así como la apariencia flotante del asiento con capacidad para dos personas.
La estética de la NAON Zero-One deja alto el listón a la ficha técnica, pero ni mucho menos decepciona en este aspecto. Dada su potencia se posiciona como un scooter eléctrico equivalente a uno de gasolina de 125 centímetros cúbicos. Se trata de un motor de tipo wheel hub (ubicado en el buje de la rueda trasera) que rinde 7 kW de potencia (9,34 CV) y unos casi descomunales 200 Nm de par motor que llevan al scooter eléctrico hasta una holgada velocidad máxima de 100 kilómetros por hora. La cifra de aceleración no la declaran, pero dado el par motor que rinde debería alcanzar los 50 por hora en pocos segundos.
El motor eléctrico se alimenta de un paquete de baterías que se ubican bajo el piso de la motocicleta, y aunque declaran capacidad, debería tratarse de un paquete de tamaño relativamente grande, ya que sí que adelantan que es capaz de recorrer 140 kilómetros con una sola carga.
Trasera de la NAON Zero-One.
A pesar de que las imágenes con las que la firma acompaña su web rezuman calidad y de que el sistema eléctrico brinde cifras a la altura de pocos scooters eléctricos, el precio de la NAON Zero-One está muy ajustado. Anuncian en la web que está disponible como precio base por 4.920 euros, a lo que habrá que sumar impuestos si se encarga una unidad desde España.
