Tesla ha actualizado la información de sus progresos en la producción de las celdas 4680 que deberían formar parte de las baterías de sus coches eléctricos. Cuando fueron anunciadas, se presentaron como un hito en la innovación de este componente, que revolucionaría los costes de fabricación y la eficiencia de los vehículos. Sin embargo, las dificultades que conllevan algunos procesos de fabricación, están retrasando su implementación, iniciada en el Model Y que se fabrica en Austin Texas. El nuevo comunicado incluye incluir argumentos contradictorios: anuncia el progreso en la rampa de producción y, por otra, parte, la reducción de su dependencia.
En 2020, el famoso Battery Day fue el pistoletazo de salida para una nueva tecnología de baterías que Tesla consideraba un hito histórico, una revolución en la producción de los coches eléctricos y en la eficiencia general de este componente. Un nuevo formato de celda de batería que revolucionaría la industria al reducir los costes en casi un 50%. En ese momento, el fabricante de automóviles ya estaba operando una línea de producción piloto en Fremont, California.
Posteriormente, Tesla admitió que varias partes del proceso de producción y en concreto el recubrimiento en seco de sus electrodos, complicaban alcanzar una producción masiva de las celdas, con lo que el proceso de implementarlas en el Model Y, el primero de sus coches eléctricos que las incorporaría, se demoró más de los esperado. La intención del fabricante es que tanto el Tesla Cybertruck como el Tesla Semi incorporen este tipo de baterías desde el principio de su producción.
Hasta ahora, la información proporcionada por el fabricante ha sido escasa en cuanto a la cantidad de celdas producidas mensualmente. Este mes, junto con los resultados financieros del primer trimestre Tesla ha actualizado los datos sobre la producción argumentando que “el número total de 4680 celdas producidas (enviadas para su empaquetamiento) aumentó tres veces de manera secuencial en el tercer trimestre”.
Un dato que realmente no aporta mucho para conocer la realidad de la producción porque no se conoce el dato de las celdas fabricadas en el segundo ni en el primer trimestre. Pero el director financiero de Tesla, Zachary Kirkhorn, compartió una información adicional durante la conferencia posterior a la publicación de los resultados financieros: “La rampa de producción va bien, como dijo Elon: la producción total aumentó tres veces trimestre tras trimestre, y la producción está a punto de superar las necesarias para 1.000 automóviles por semana este trimestre”.
Considerando una media de 60 kWh por coche, este dato significaría una producción de 60 MWh semanales o 3 GWh al año, que si bien no es una capacidad de producción masiva, sí es ciertamente significativa.
Paralelamente, Tesla también ha realizado nuevos comentarios que muestran que el fabricante está tratando de no depender de este aumento de producción de celdas 4680 para sus nuevos programas de vehículos. Su CEO, Elon Musk, ya advirtió que no está utilizando las celdas 4680 en el Semi, el camión eléctrico que tiene prevista sus primeras entregas el próximo 1 de diciembre.
Ante la pregunta de si el Tesla Cybertruck, la pick-up eléctrica de la compañía, se vería afectada por la rampa de producción de las celdas 4680, el dirigente dijo que no espera que esta se vea afectada como sí le ha ocurrido al Semi.