La Unión Ciclista Internacional (UCI) ha puesto en marcha el primer campeonato oficial de bicicletas eléctricas de carretera. El E-Bike Grand Prix Racing Series (EBK) constará de 10 series que se celebrarán en otras tantas ciudades durante los dos días del fin de semana. Participarán 80 ciclistas profesionales repartidos en 10 equipos mixtos que disputarán una crono por equipos y una carrera tipo critérium. Además del espectáculo, el objetivo de la UCI es fomentar la micro movilidad en las ciudades, por lo que paralelamente, en cada ciudad, se organizará una exposición dedicada a ella.
El año pasado, la UCI anunciaba el primer gran campeonato de bicicletas eléctricas de montaña. Las World E-Bike Series (WES) se convirtió así en la primera competición oficial a nivel mundial con el objetivo principal de dar apoyo a la industria de las e-bikes, poniendo a su disposición un escenario de alta competición.
Ahora, la UCI anuncia una segunda competición oficial, esta vez dedicada a las bicicletas eléctricas de carretera. Según describen los organizadores el funcionamiento de cada una de las 10 series que la componen se trata de un campeonato urbano basado en los e-Prix de la Fórmula E. Los escenarios serán 10 ciudades repartidas por los cinco continentes: Asia, Europa, América del Norte, Australia y África. Por ahora, tan solo se ha confirmado que la carrera inaugural se celebrará en Dubai.
Durante el fin de semana, 10 equipos mixtos formados por 80 ciclistas «World Class» competirán para hacerse con cada una de las 10 series. El formato de la competición abarca sábado y domingo, de manera que el primer día disputarán una crono por equipos y el segundo día se dedicará a una carrera tipo critérium de una hora de duración.
Los recorridos urbanos de cada una de las series constarán de diferentes tramos entre los que se incluirán zonas de pendientes de hasta un 20 % que mostrarán las cualidades de este tipo de bicicletas para atacar los terrenos más duros. La longitud de cada circuito será aproximadamente de 2,5 kilómetros y se ubicarán todo lo que sea posible en el centro de las ciudades, de manera que sea fácil para el público disfrutar y comprender la competición utilizando para ello las tecnologías de realidad virtual y aumentada existentes hoy en día.
Cada uno de los 80 ciclistas que participan contará con una misma bicicleta y sola carga de batería para todo el fin de semana, de manera que tendrán que gestionar su energía eléctrica para que puedan aprovecharse de ella en los momentos que más se necesite. A diferencia de las bicicletas de montaña, que atraviesan zonas en las que la asistencia eléctrica es necesaria casi en cada momento, en el caso de las de carretera este sistema solo se utilizará en los tramos en los que sea necesario o por razones estratégicas.
Cada una de las series se verá acompañada por un «Greenwashing», una exposición que se realizará en cada ciudad con el objetivo de mostrar las ventajas de la micro movilidad. Además, para organizar cada una de ellas se emplearán recursos locales, de manera que no será necesario transportar el material de un lugar a otro, reduciendo así la huella de carbono de la competición. Por ahora no se han anunciado ni las sedes ni las fechas de las 10 carreras de una competición que se convertirá un momento crucial en la historia de la bicicleta.