La gama de bicicletas eléctricas de Haibike gana una nueva serie de modelos con la llegada de la Haibike Layk, que cuyos montajes se encuentra la Layk SE, una bicicleta eléctrica que la propia marca ha definido como una tipo trail "de pura sangre".
Se trata de un modelo concebido por y para la diversión en senderos de tierra y descensos, y mejor cuanto más complicados. La firma no ha escatimado en componentes, entre los que se encuentran FOX y Fazua como responsables de su esquema de suspensión y de su sistema eléctrico, los dos aspectos más determinantes en una bicicleta eléctrica de montaña de este tipo.
Dado que es un montaje que pretende mantener el peso a raya, la marca ha optado, por un lado, por una geometría compuesta en fibra de carbono y por otro por una batería de tamaño contenido para no sumar peso en exceso al conjunto. En total marca 18,5 kilos sobre la báscula (en talla L), que aunque en términos generales es una cifra alta, para tratarse de una bicicleta eléctrica de doble suspensión resulta un peso contenido.
Son 430 Wh de capacidad los que anuncia la marca, aunque para quienes busquen disponer de más batería, Haibike ofrece como opción un extensor con el que aumentar la batería en otros 210 Wh extra, alcanzando los 540 Wh totales, que deberían valer para completar jornadas de uso a ritmo ligero.
El motor eléctrico que se encarga de la asistencia al pedaleo forma parte del sistema Fazua Ride 60, que fue presentado antes de verano como uno de los más avanzados del sector gracias a la relación entre peso y prestaciones. Y es que, con un peso de tan sólo 1,94 kilos, el propulsor se permite rendir los 250 W máximos de potencia permitidos en Europa junto a 60 Nm de par motor.
Uno de los aspectos más conseguidos de la Layk es que Haibike ha conseguido colocar parte del motor dentro del tubo vertical del cuadro, lo que hace que a la vista el pedalier resulte menos voluminoso que en otras bicicletas eléctricas de motor central, mientras que la batería se coloca dentro del tubo diagonal, y gracias a la posición del motor se puede extraer por la parte baja del mismo, lo que ha permitido a la marca diseñar una bicicleta eléctrica mucho más limpia en términos de líneas.
En cuanto al apartado de las suspensiones, FOX pone a disposición del fabricante alemán de bicicletas un sistema de 140 milímetros de recorrido, y por supuesto doble suspensión. El resorte incorporado en el cuadro es un Float X Factory, mientras que la horquilla delantera es una 36 Float Factory de alumunio.
La ficha técnica la acaba de redondear un sistema de frenos XTR M9120 de Shimano con pinzas de cuatro pistones mordiendo discos de 203 milímetros de diámetro, y una transmisión Deore XTR M9100 también proporcionada por la especialista japonesa.
Tal despliegue de componentes, consecuentemente, tiene un precio. La Haibike Lyke SE tiene un precio en España de 9.999 euros, mientras que los montajes Lyke 11 y Lyke 10 recortan en cuanto a calidad para ofrecerse en precios de 7.499 y 6.499 euros, respectivamente.
Se trata de un precio que sólo los aficionados más acérrimos al off-road estarán dispuestos a pagar. Para la mayoría de los mortales existen alternativas mucho más económicas, como la MOMA e-FAT Pro, una fat-bike de doble suspensión (disponible en este link de Amazon), o la Rockrider E-ST 500 de Decathlon, que recientemente ha mejorado gracias a equipar un motor eléctrico central del especialista Brose.
