En 2019, Specialized incluía en su oferta una nueva gama de bicicletas eléctricas de carretera y gravel, cuando todavía no se veía venir el impresionante incremento que se ha producido en el sector en los últimos años. Los propietarios de una bicicleta de la gama Turbo Creo SL han disfrutado de una gran autonomía, gracias a una extraordinaria ligereza, 12 kilogramos, combinada con potencia y conectividad. Ahora, en 2022, es un escenario mucho más complicado por el aumento de la competencia, la renovación viene de la mano de la tecnología.
El fabricante californiano de bicicletas de alta gama ha empelado sus mejores armas para mantener en la élite a la Turbo Creo SL. Su cuadro de carbono ultraligero FACT 11r incluye el sistema de absorción de las irregularidades del terreno Future Shock 2.0. Esta tecnología, montada en la parte alta del tubo de dirección, proporciona 20 mm de recorrido a la parte delantera de la bicicleta. Cuando se atraviesa un terreno accidentado, la bici se mueve hacia arriba, hacia las manos, manteniendo su impulso hacia adelante sin afectar al rendimiento. Al estar situado bajo la potencia, las ruedas de la bicicleta se mantienen unidas de forma rígida por el cuadro. En otras palabras, al no variar la distancia entre ejes a lo largo del recorrido de la suspensión, como ocurre con el sistema tradicional, se añade un beneficio añadido: una dirección extremadamente predecible.
En la parte eléctrica, se mantiene el motor SL 1.1 que ofrece una potencia de 240 W y un par de 35 Nm. El motor, diseñado específicamente para esta bicicleta sea ancla al tubo diagonal y apenas se distingue a simple vista. El diseño de su curva de potencia mantiene una cadencia natural, lo que quiere decir que al detectar una variación en la potencia de pedaleo la potencia se incrementa o se disminuye de manera que no se noten ni tirones ni retenciones desagradables. De esta manera, el motor entrega la máxima potencia de forma sostenida entre las 70 y 100 rpm.
La batería SL1-320 que lo alimenta, también específica para este modelo, se integra perfectamente en el tubo diagonal tiene una capacidad de 320 Wh, y ofrece hasta 130 km de autonomía en modo ECO. La carga completa puede llegar a demorarse hasta dos horas y media. De manera opcional, es posible añadir una segunda batería que se monta en el lugar del porta bidones de agua que añade otros 65 kilómetros extra.
La gestión de los modos de asistencia se realiza a través de la aplicación Mission Control. Gracias a la gran cantidad de configuraciones, las bicicletas Turbo Creo SL se convierten en herramientas capaces de hacer disfrutar a sus propietarios de todo tipo de carreteras y caminos. Las renovaciones tecnológicas relacionadas con la conectividad no acaban aquí. En esta generación se incorpora en el tubo horizontal una pantalla digital que sustituye a los led informativos de la generación anterior. La MasterMind TCU2 muestra el nivel de batería, la potencia que está generando el ciclista y la potencia con la que asiste el motor eléctrico. Las numerosas páginas de datos son accesibles mediante el mando Turbo Road situado en el manillar.
Este controlador permite además añadir el monitoreo de la frecuencia cardíaca vía Bluetooth Smart o ANT+, que puede ser configurada mediante la aplicación móvil. Además, la tecnología MicroTune, que ya estaba presente en otros modelos de la marca con asistencia eléctrica llega ahora también a las Turbo Creo SL 2022. Con ella, es posible cambiar sobre la marcha los niveles de asistencia. Combinada con el Smart Control el sistema controla automáticamente el nivel de la batería en función de la distancia que se quiera recorrer.
Por último, Specialized ha añadido tres nuevos montajes a la gama:
- S-Works Turbo Creo SL que cuenta con cambio SRAM Red eTap XPLR, ruedas Roval Terra CLX y neumáticos Turbo RapidAir de 30 mm.
- Specialized Turbo Creo SL Expert con cambio SRAM Rival XPLR, ruedas Roval C38 y neumáticos Turbo Pro de 30 mm.
- Specialized Turbo Creo SL Comp con cambio Shimano GRX RX600 mecánico, ruedas DT Swiss R470 y neumáticos Turbo Pro 30mm.
