El Grupo Volvo y la división de camiones de Daimler (propietaria de Mercedes-Benz) acaban de anunciar una alianza para desarrollar conjuntamente pilas de combustible y producirlas a gran escala. El objetivo es aplicarlas en vehículos de gran tonelaje como camiones y autobuses eléctricos de hidrógeno, sin emisiones contaminantes, en el marco del 'Acuerdo Verde' para un transporte sostenible y neutral en carbono.
Daimler Truck (propietaria de Mercedes) y Volvo han firmado un primer acuerdo para la creación de una empresa conjunta (joint-venture) participada al 50% por cada compañía. Daimler, que ya trabajaba en el desarrollo de pilas de combustible, consolidará toda su actividad en cuanto al hidrógeno en esta nueva empresa conjunta. Volvo adquirirá el 50% de la misma por una suma aproximada de 600 millones de euros.
La empresa conjunta tendrá su base de operaciones en Nabern (Alemania), actualmente la sede de Mercedes-Benz Fuel Cell GmbH, y plantas de producción en Alemania y Canadá. Esta nueva empresa operará como una entidad independiente, por lo que Volvo y Mercedes continuarán siendo competidores en todas las demás áreas de negocio, como sus camiones y autobuses (y, por supuesto, también en los coches).
El hidrógeno apunta a convertirse en una alternativa para reducir las emisiones de CO2 del transporte por carretera, y en este sentido apuntan cada vez más fabricantes. No obstante, es todavía una tecnología poco madura. Unir fuerzas entre Daimler y Volvo permitirá disminuir los costes de desarrollo para ambas compañías y permitirá acelerar la introducción en el mercado de camiones de hidrógeno de gran tonelaje, con pilas de combustible y sin emisiones.
Camiones de hidrógeno de larga distancia para la segunda mitad de la década
Esta alianza es más necesaria si cabe en el contexto de la recesión económica actual, un tiempo en el que la cooperación entre fabricantes y las fusiones se harán más necesarias para cumplir los objetivos de negocio.
Según han anunciado ambas compañías, el objetivo es ofrecer los primeros camiones de hidrógeno producidos en serie para aplicaciones de larga distancia para la segunda mitad de esta década. No han concretado más en cuanto a fechas, pero no veremos estos vehículos antes de 2025.
En el comunicado también han dejado la puerta abierta para aplicar las pilas de combustible en otro tipo de vehículos. Hay que señalar que el acuerdo preliminar firmado todavía no es vinculante, aunque se espera firmar el acuerdo final antes de acabar el año.