En muchas películas de ciencia ficción vemos como en el futuro no serán necesarios dispositivos externos para controlar dispositivos como el teléfono móvil. Aunque no vivamos en el 2050, hoy ya es posible abrir las puertas de un coche sin tener que sacar el mando, es de lo más común. Sin embargo, hay quien piensa que tener una llave, o una tarjeta en el caso de Tesla, sigue siendo excesivamente molesto. Ese planteamiento ha llevado a este propietario de Tesla a implantarse un chip de control en la mano. ¿Genio o loco?
Al igual que los chips que se implantan en los perros y en muchas mascotas domésticas, Brandon Dalaly, el orgulloso propietario de un Tesla Model 3 en Estados Unidos, ha considerado que la mejor forma de librarse de cualquier complemento adicional para abrir y arrancar su coche era instalarse el localizador en la palma de la mano. Una jeringa ha implantado el chip que no se aprecia en ningún momento bajo la piel de la mano derecha de este excéntrico propietario de 39 años.
Lo más increíble de todo es que, posiblemente, Tesla sea la compañía que ofrece la llave de apertura y desbloqueo más cómoda del mundo. Una sencilla tarjeta que puede asociarse con el móvil para que no tengamos que sacar nada del bolsillo. A pesar de ello el bueno de Brandon ha creído que esta forma era incluso más cómoda. Tan sólo tiene que pasar la mano por el pilar B, panel donde se encuentra el localizador de desbloqueo, y listo.
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— Brandon Dalaly (@BrandonDalaly) August 16, 2022
Finally decided to take my phone key issues in to my own hands... literally. Tesla key chip implant. pic.twitter.com/RVK8ZaePoI
Dentro de poco, más usuarios seguirán los pasos del señor Dalaly. Brandon es el primero de un grupo experimental formado por unos 100 participantes, que está probando estos chips que han sido desarrollados por la empresa Vivokey. Según las especificaciones de la compañía, los chips están fabricados con materiales biocompatibles que no producen daños de ningún tipo. Poco tiempo después de la implantación el chip queda encapsulado bajo la piel sin afectar al movimiento de la mano y sin causar efectos secundarios.
Lo más increíble de todo es que los chips son actualizables de forma remota, como las descargas OTA de los coches eléctricos. Esto les permite ampliar su utilidad, aunque por el momento las operaciones se limitan a unos pocos usos. Sin duda estamos ante un nuevo paso en la industria del futuro. Estos 100 valientes, o locos, podrán decir que fueron los primeros en contar con algo semejante. Por el momento el primer explorador reconoce que es un buen truco de magia y un excelente tema de conversación para fiestas.
Seguro que más de uno está pensando en sumarse a esta idea. Si ese es el caso debes saber que el precio no será un inconveniente para convertirte en una especie de cyborg. El coste del chip ronda los 300 dólares, algo bastante razonable. A eso hay que sumarle el coste de la implantación, lo que supone otros 100 dólares adicionales. Es decir, por 400 dólares puedes librarte de llaves, tarjetas e incluso móviles para abrir y arrancar tu Tesla. La función manos libres adquiere un nuevo significado.
