El BMW i4 eléctrico, diseñado como una berlina de cinco puertas, es el primer coche eléctrico de BMW que atenta a un nicho de mercado cuyo de volumen de ventas goza de una cuota significativa, pues modelos como el iX o el anterior i3 atienden a conceptos que divagan entre varios segmentos. Este enfoque del i4 como producto ya ha tenido repercusión en la organización de BMW, quienes en primera instancia parecen no haber calculado bien el alcance de su berlina eléctrica, pues el i4 está teniendo una demanda mayor de la esperada.
No obstante el título de berlina eléctrica de la marca la durará tan sólo hasta que el BMW i3 haga acto de presencia en las portadas de manera oficial, pues esta misma mañana nos hemos hecho eco de su filtración, aunque está por ver bajo qué enfoque y a qué mercados va dirigido cada modelo por parte de la marca.
De momento, y tal y como ha dado a conocer el diario alemán especializado en economía e industria del motor Wiwo.de, BMW ha tenido que, aparentemente, planificar por adelantado turnos de trabajo adicionales en su fábrica de Múnich, donde tiene lugar la producción en serie del BMW i4.
Actualmente, y puesta en contexto la situación de las ventas de BMW en lo relativo a coches eléctricos, a la firma alemana le urge aumentar su cuota de mercado dentro de este nicho, sobre todo en comparación con Tesla. Según lo que expone el diario alemán, actualmente la lista de espera para un BMW i4 es de nueve meses, y de no poder solución rápidamente la lista se acercará peligrosamente al año de espera.
BMW i4.
En base a esta tesitura BMW planea introducir turnos adicionales los sábados en su planta de Múnich durante el primer trimestre de 2022, para así poder lidiar con el pico de demanda habitual con la llegada de cada nuevo modelo.
Wiwo.de ha preguntado directamente a la marca por esta situación, a lo que BMW ha aludido a la gran flexibilidad de su sistema de producción. La marca explicó textualmente: "Estamos en condiciones de ampliar el volumen, por ejemplo, añadiendo turnos adicionales, y así satisfacer la gratificantemente alta demanda". Y es que, aunque aún la situación de desabastecimiento de semiconductores afecte a las distintas cadenas de montaje, los fabricantes priorizan con total claridad a coches de bajas emisiones.
Recientemente BMW pudo, por fin, dar comienzo a las entregas de su BMW i4 eléctrico, y lo hizo con un evento celebrado por todo lo alto en su fábrica de Múnich, a donde acudieron los primeros clientes a recoger las unidades más tempranas de la berlina eléctrica. En la actualidad tan sólo dos versiones distintas tienen lugar en la gama del i4 eléctrico. La convencional tiene un precio de partida de 60.900 euros, mientras que el tope de gama queda representado por el i4 M50 y sus 75.500 euros.
