Dentro de un año, a finales de 2020, Lucid Motors comenzará la producción del Lucid Air, en Casa Grande, Arizona. Ese es el tiempo que estima la empresa china nacida en 2007 bajo el nombre de Atieva en Silicon Valley para terminar los trabajos de construcción de la primera fase de su planta de ensamblaje. La compañía ha publicado un vídeo en el que se muestran los primeros trabajos de movimiento de tierras que arrancaron en septiembre de este año en el lugar en el que se emplazará su fábrica.
El mes pasado, la Comisión de Planificación y Zonificación de Casa Grande firmó la aprobación definitiva del proyecto de construcción de las sucesivas fases de la fábrica. Los primeros trabajos de excavación, vaciado, conformación de cimientos y movimientos de tierra están en marcha desde septiembre. En breve comenzarán las labores de hormigonado de las zapatas de cimentación y la formación de las estructuras de los diferentes edificios que componen la instalación.
Por su parte, en su sede de California, el equipo de ingeniería de Lucid Motors está completando el desarrollo del Lucid Air, planificando la estrategia comercial y elaborando el plan de despliegue de la distribución. Con el arranque de la producción a finales de 2020, todos los cabos deberán estar atados para que las primeras unidades reservadas lleguen a manos de sus clientes: "Los primeros miembros de nuestro equipo de ensamblaje de Casa Grande están trabajando junto a nuestros ingenieros en la sede de Silicon Valley para crear los prototipos de producción final del Lucid Air", asegura la empresa en un comunicado.
En el equipo avanzado de Casa Grande trabajan los recién graduados del programa de Tecnología Industrial Automatizada de Central Arizona College , un curso en el que ha colaborado Lucid Motors. "La colaboración en etapas tempranas fortalece al equipo de fabricación y permite identificar y abordar rápidamente los posibles desafíos de ensamblaje mucho antes de que comience la producción", asegura la empresa. En las próximas semana, Lucid Motors celebrará un evento especial que será anunciado a través de sus redes sociales
Peter Rawlinson, ex ingeniero jefe de desarrollo del Tesla Model S, es el director de Tecnología de Lucid Motors. La empresa es heredera de la plataforma eléctrica Atieva, desarrollada sobre la base de una Mercedes-Benz Vito. Hace más de tres años presentó en público el primer prototipo del Lucid Air, una berlina eléctrica premium cuya configuración mecánica inicial constaba de una batería de 100 kWh o 130 kWh con una autonomía entre 480 y 640 kilómetros y dos motores eléctricos situados en ambos ejes que generan 745 kW (1.000 CV) de potencia y lo aceleran de 0 a 100 km/h en 2,5 segundos.
El objetivo de Lucid Motors
Rawlinson asegura que el Lucid Air no busca a los clientes de Tesla, sino que está dirigido al mercado de las grandes berlinas lujosas como el Mercedes S-Class y BMW 7-Series, en el que se mueven anualmente más de 100.000 millones de dólares solo en Estados Unidos.
Dentro de seis años, una tecnología de baterías de coste reducido, sin la degradación que produce la carga rápida, la mayor eficiencia de los coches eléctricos y una red de recarga ultrarrápida generalizada, permitirán a Lucid Motors fabricar un coche eléctrico de lujo, del tamaño de una berlina, por menos de 30.000 dólares (26.300 euros). "Esta es nuestra estrategia a largo plazo y lo que me impulsa a continuar trabajando", ha declarado Rawlinson.