Los rumores, noticias y desmentidos sobre la posibilidad de que Apple se hubiera hecho con el control de Tesla son habituales en la red. Sin embargo, ahora ha sido el propio Elon Musk el que ha confirmado que durante el 'infierno de producción' del Tesla Model 3 ofreció a Tim Cook la posibilidad de hacerse con ella por la décima parte de su valor actual. El CEO de la empresa de Cupertino no se interesó por la oferta de tal forma que, incluso, rechazó celebrar una reunión para hablar sobre ello.
Muchos insisten en comparar a Tesla y Apple como si fuesen dos empresas que han llegado a donde están de manera similar. Sin embargo, si se repasa la historia se comprueba que no es así. Otro factor de comparación, este quizás más acertado, es la capacidad de innovación, aunque en este caso popularizar productos ya existentes para que pareciesen un invento nuevo. En el caso de Tesla esto es diferente ya que realmente ha revolucionado la industria del automóvil y, al igual que Apple, ha sabido vender un producto creando auténticos activistas entre sus primeros clientes.
Quizás es esta la razón por la que la compra de Tesla por parte de Apple ha sido una noticia recurrente en la última década. En 2019, la consultora Roth Capital Partners aseguraba que Apple intentó comprar a Tesla en 2013 por más de lo que valían en ese momento. Ante los problemas para aumentar la producción del Model S, Musk buscaba una solución de emergencia.
Agosto de 2018, el 'infierno de producción' del Tesla Model 3.
Ashlee Vance revela en la biografía que ha escrito de Elon Musk que el dirigente tenía un acuerdo con Larry Page, el director de Alphabet, la empresa matriz de Google, para que el gigante de internet comprara Tesla, pero el trato nunca se concretó. En ese mismo momento surgió el rumor de que Musk se habría acercado a Adrian Perica, jefe de operaciones de adquisición de Apple, para ofrecerle Tesla. En los últimos años, Apple ha logrado conocer cómo trabaja el fabricante californiano después de contratar a varios de sus ingenieros y ejecutivos de alto nivel, incluyendo a su jefe de motores eléctricos, Michael Schwekutsch. El Proyecto Titán, abandonado y recuperado por Apple en varias ocasiones, ha vuelto a las portadas tras la noticia de que el coche eléctrico de Apple podría presentarse el año que viene. El CEO de Tesla llegó a decir que "Apple era el cementerio de Tesla", aludiendo a la gran cantidad de ex empleados que habían acabado en sus filas.
Superados los momentos difíciles, las intenciones de venta se diluyeron, aunque las nubes negras volvieron sobre el fabricante californiano durante lo que Musk bautizó como "el infierno de la producción" del Tesla Model 3. Ahora, él mismo ha confirmado que intentó vender Tesla a Apple durante esa época, pero fue Tim Cook, su CEO, el que no mostró interés, ya que ni siquiera se presentó a la reunión. Una decisión de la que probablemente se arrepentirá, puesto que Musk estaba dispuesto a dejársela a un precio de derribo: la décima parte de su valor actual. "Durante los días más oscuros del programa de producción del Model 3, me acerqué a Tim Cook para discutir la posibilidad de que Apple adquiriera Tesla por la décima parte de su valor actual, pero se negó a participar en la reunión", asegura. La cantidad que pedía eran aproximadamente unos 60.000 millones de dólares, comparable con los beneficios de Apple al cierre del año fiscal 2020, 57.411 millones de dólares.
El coche eléctrico de Apple podría presentarse en 2021.
Ahora, ante el nuevo rumor de que Apple presentará su coche eléctrico el año que viene, el CEO de Tesla no parece impresionado, porque sus tecnologías son precisamente las que Tesla ya tiene en cartera: una batería con química LFP que Tesla ya usa en el Model 3 chino, y, posiblemente, un paquete de batería estructural similar al que Tesla dio a conocer hace unos meses durante el 'Battery Day'.