Toyota lleva años trabajando en el desarrollo del hidrógeno, ya sea como combustible o como forma de generar electricidad mediante el uso de una pila de combustible. Tanto es así que ya comercializan un vehículo de este último tipo en Europa, el Mirai. No obstante, en España no ha tenido demasiado éxito debido principalmente a la ausencia de puntos de repostaje de este material y su alto precio de venta.
En otros puntos del mundo ha sucedido más o menos lo mismo, su aceptación no ha sido demasiado grande. Pero, pese a ello, Toyota sigue involucrada en varios proyectos sobre esta tecnología de cara al futuro. Siguen opinando que llegará a ser una opción mecánica más dentro del mercado de turismos. Sobre esto, hay una multitud de directivos que no opinan exactamente eso. Uno de ellos ha sido Michael Lohscheller, CEO de Polestar, durante una entrevista con el medio alemán 24auto.
La electrificación a batería promete ser la tecnología que se imponga
El actual directivo de la marca sueca, antes de comandarla, también fue director en Nikola, la empresa de camiones de hidrógeno norteamericana. Durante la entrevista, al ser preguntado por esta tecnología de cara a su implementación en automóviles, Lohscheller fue claro: “El hidrógeno no se impondrá en los turismos. El futuro de los coches será eléctrico, gracias a la eficiencia energética”. Esta es una opinión que también comparten otros responsables del sector.
No obstante, el CEO de Polestar sí cree que puede ser un avance crucial para la movilidad ‘cero emisiones’ en el transporte pesado. “El hidrógeno puede desempeñar un papel importante en los camiones pesados, porque de lo contrario habría que colocar una cantidad increíble de baterías en un camión y entonces se perdería carga útil”, aseguró Lohscheller.
Actualmente ya existen camiones con este tipo de tecnología y, de forma paralela, también se está trabajando en llevarla de forma masiva a la aviación como sustituto del combustible fósil. Sin embargo, el sector de los turismos está más enfocado en el avance a base del uso de una batería. El desarrollo que está teniendo este tipo de movilidad está siendo realmente alto con respecto a lo que puede llegar a ofrecer el hidrógeno.
A día de hoy, la única ventaja efectiva del hidrógeno frente a la electrificación por batería es el tiempo de recarga o repostaje. En los vehículos con pila de combustible se hace tan rápido como en un modelo con motor de combustión tradicional. Pese a esto, las baterías cuentan con una trayectoria muy prometedora de cara los próximos años. De hecho, para comienzos de la próxima década, ya se espera que existan alternativas en las que poder recargar 160 kilómetros por minuto de enchufe, como las firmadas por StoreDot.
El propio CEO de Polestar también apostilla en su entrevista que los coches eléctricos son muy superiores a sus rivales de combustión. “No he conocido a alguien que haya conducido un coche eléctrico y haya dicho: ‘No me gusta, voy a volver a la gasolina’. Eso no pasa y demuestra una vez más la superioridad de esta tecnología”, aseguró.