Hace sólo unos días, Luca de Meo, presidente de la Asociación Europea de Constructores de Automóviles (ACEA), sacaba a la palestra que los objetivos impuestos para 2025 por parte de la Unión Europea podrían ser bastante complicados de cumplir por parte de ciertos fabricantes. Este objetivo quedaba fijado en 94 gr/km de media, mientras que el límite actual es de 116 gr/km. La considerable rebaja podría traer multas a aquellas que no lo cumplan.
Tanto es así que buena parte de las compañías tendrán que hacer numerosos movimientos para alcanzar esta media, aunque hay otras que podrían tener ‘fácil’ este logro. Con todo ello, desde ACEA han presionado a la Unión Europea para que retrase dos años la llegada de esta medida, para salvaguardar así la economía de muchas compañías, pues las mencionadas multas podrían alcanzar los 13.000 millones de euros sólo en el sector de los turismos.
Carlos Tavares se opondrá a la propuesta de retraso
Sin embargo, pese a esta ‘amenaza’, Carlos Tavares, CEO de Stellantis ha confirmado que se negará a la introducción de tal retraso en la llegada de esta normativa. Ha sido en una entrevista con el medio Agence France Presse (replicado por Automotive News Europe) donde el directivo ha dado su opinión personal al respecto: “Sería surrealista cambiar las reglas ahora”. Desde la compañía sí piden que se siga apoyando la compra de coches eléctricos a través de subvenciones.
“Todo el mundo conoce las reglas desde hace mucho tiempo y ha tenido tiempo para prepararse, así que ahora es el momento de hacer una carrera”, afirmó Tavares en su intervención. También aseguró que la compañía que regenta lleva varios años preparándose a través del lanzamiento de vehículos eléctricos principalmente, por lo que retrasar ese objetivo podría echar por tierra el trabajo labrado en este último periodo. Con todo esto, hay que especificar que Carlos Tavares sacó a Stellantis de ACEA en el año 2022, dejando así de pertenecer a este grupo automovilístico.
El CEO de Stellantis puntualizó que el trabajo de la compañía en los últimos años ha sido realmente duro, pues han conseguido cumplir su objetivo de reducir costes, lanzar nuevos modelos eléctricos y plantar cara a sus competidores en este sector, principalmente Tesla y otros fabricantes chinos.
Desde ACEA, por su parte, afirmaron lo siguiente: “La industria automotriz de la UE ha invertido miles de millones en electrificación para poner vehículos en el mercado, pero los otros ingredientes necesarios para esta transición no están disponibles y la competitividad se está erosionando”.
Concretamente, la asociación automovilística se refiere con esto a que los fabricantes europeos no disponen del apoyo o las ayudas que sí disfrutan los fabricantes orientales a la hora de comercializar sus vehículos eléctricos fuera de China. Por ello, esta parte sí se alinea con la propia petición de Tavares sobre que se incrementen las ayudas a la compra de estos vehículos en el Viejo Continente.