Poca gente sabe que Elon Musk, el CEO de Tesla, nació en Sudáfrica en 1971, pero que emigró de aquel país a Estados Unidos a los 17 años para buscar fortuna.
Y ahora, cuando el CEO de Tesla se ha convertido en el hombre más rico del mundo y se permite incluso recriminar a Bill Gates, el fundador de Microsoft; Musk ha vuelto a poner sus ojos en su país natal.
Elon Musk querría construir una gigafábrica de baterías en Sudáfrica
Elon Musk habría discutido con el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa la posibilidad de que Tesla construya próximamente en este país una nueva gigafactoría de baterías.
Las conversaciones entre Elon Musk y el presidente de este país africano habría ocurrido a comienzos de 2024, pero ha sido a pocos días del final del mismo cuando la agencia Bloomberg ha destapado esta cuestión.
Según publican desde esta agencia norteamericana, Elon Musk mantuvo, inicialmente, conversaciones con Ramaphosa para que tratar de que Starlink, el servicio de Internet global basado en satélites operado por SpaceX -otra empresa del CEO de Tesla-, pudiera operara en el país africano.
Pero, tras el apartheid, Sudáfrica tiene leyes que requieren que una empresa extranjera que quiera establecerse en su país deber ser propiedad, al menos un 30%, de personas negras para conseguir los permisos necesarios. Algo que supondría que Musk debería asociarse con empresarios locales y perder parte del control de su empresa de satélites.
Una fábrica de Tesla para ‘lubricar’ el acuerdo de Starlink
Ante esta situación, y siempre según la información de Boomblerg, Elon Musk y Ramaphosa habrían hablado sobre la posibilidad de que Tesla construyera una gigafactoría de baterías en Sudáfrica como parte de un acuerdo por el que el país africano pudiera relajar las reglas, de forma que Starlink pudiera establecerse en él con menores requisitos.
Tesla ya produce sus unidades de almacenamiento en su fábrica de Nevada, así como, desde noviembre de 2022, también en su gigafactoria de Lathrop, en California. En esta instalación produce, anualmente, hasta 10.000 Megapacks -las baterías más potentes de su empresa, cada una capaz de almacenar algo más de 3 GWh-, lo que supone una producción anual de 40 GWh.
Pero, más allá de Estados Unidos, Tesla acaba de poner en funcionamiento -aún en pruebas- su gigafactoría de baterías situada en Shanghai y que contará con la misma capacidad de producción. Una capacidad que permitirá a Tesla ofrecer estas unidades de almacenamiento en la zona de Asia Pacífico.
Tesla Energy, el ‘discreto’ negocio de Tesla que crece vertiginosamente
La apertura de la gigafactoría de baterías de Tesla en Shanghai no es más que el reflejo del boom que está viviendo el segundo negocio de Tesla, que no son ni los coches autónomos ni los robots humanoides.
Hablamos de la poco conocida división Tesla Energy, que produce desde baterías domésticas hasta sistemas de almacenamiento energético -que dan respaldo y soporte a muchas compañías privadas y públicas en Estados Unidos y otros rincones del planeta- y que, en el último año, ha crecido nada menos que un 157%. No en vano, a mediados del pasado año, ya había desplegado equipos de almacenamiento energético por valor de 13,5 GWh, frente a los 14,72 GWh que desplegó en todo 2023.
Y el interés de Elon Musk y Tesla por levantar una gigafactoría de baterías en Sudáfrica no es nuevo, ni mucho menos. Esta posibilidad se rumorea desde 2016, tal y como recogía entonces Electrek, un portal estadounidense especializado en electromovilidad.
Además, y como indicaban desde Electrek, la construcción de una gigafactoría de baterías de Tesla tendría mucho sentido en África, ya no sólo por que la empresa de Elon Musk pudiera ofrecer estas unidades de almacenamiento en todo ese continente, sino por que la red de infraestructuras eléctricas y de energía en África no es la más avanzada ni fiable del mundo.