Nunca se sabe lo que puede pasar a la hora de lanzar un nuevo coche al mercado. Las marcas corren un riesgo importante, pero controlado. Volvo está en plena fase de actualización de su flota para convertirse en una marca 100% eléctrica. El EX90 es el primer modelo de esa nueva etapa y aunque nada en él podría predecir un elevado volumen de ventas, la realidad ha superado a las expectativas. Los propios suecos se muestran sorprendidos ante la buena acogida que ha tenido el reemplazo del Volvo XC90.
Inmersa dentro de la corporación de Geely, el fabricante nórdico vive una etapa muy satisfactoria en cuanto a tecnología, gama y lanzamientos. El EX90 se presentó el pasado 9 de noviembre con un formato poco propenso al éxito. Un enorme SUV de 5,04 metros de largo, 1,96 metros de ancho, 2,98 metros de distancia entre ejes y un peso en vacío de 2.818 kilogramos. Entre sus rivales figuran nombres ilustres como el BMW iX o el Mercedes EQE SUV, además del Tesla Model X. Ninguno de ellos destaca por sus excelentes cifras de ventas, pero el Volvo parece estar destinado a romper esa maldición.
Volvo considera al EX90 su punto de inflexión y el modelo que les permitirá expandir su filosofía. Basado en la plataforma SPA2, la misma que otras importantes unidades del Grupo Geely, estrena tecnologías pioneras en la industria, sobre todo en materia de seguridad. Está considerado como el coche más seguro del mundo en la actualidad, manteniendo así una condición intrínseca en el ADN de la marca sueca desde sus inicios. La combinación de diseño, calidad, equipamiento, rendimiento y seguridad ha hecho del EX90 un inesperado éxito comercial.
Tampoco sabemos qué cifras se esperaban, pero desde Volvo reconocen que les ha sobrepasado el recibimiento en todo el mundo. "Esto ha superado las proyecciones internas más audaces y ambiciosas de la compañía", señalan. "Como resultado, Volvo Cars ha cerrado el libro de pedidos por el momento porque la primera producción programada se ha agotado, pero volverá a abrir pronto", anunciaron. Hace unos meses ya se supo que la producción del EX90 se había adelantado con respecto a la fecha inicialmente prevista. La planta de Volvo en Charleston, Carolina del Sur, ya ha comenzado a ensamblar las primeras unidades.
A la vista está que los suecos se van a quedar cortos y, como no quieren morir de éxito, lo mejor es paralizar las ventas y esperar a que las líneas de montaje impriman más velocidad a la producción. Durante este impás, Volvo seguirá trabajando en nuevas versiones. Por ahora se ha confirmado el desarrollo de una versión de acceso con un sólo motor y otra que se posicionará como la más prestacional de toda la gama. Si bien la primera se posicionará como la unidad de mayor rango homologado, la segunda tendrá que superar la barrera actual de los 517 CV que luce la versión Performance.
Por lo que sabemos, el Volvo EX90 todavía tardará unos cuantos meses en llegar a España. Las primeras entregas están programadas para finales de este año o principios del que viene. Sin embargo, desde hace meses, los clientes ya saben cuánto dinero tienen que desembolsar por él. El EX90 más barato arranca sus tarifas en los 104.895 euros, mientras que el modelo más caro de la familia está disponible actualmente desde los 109.904 euros.
