Tesla ha presentado oficialmente a los medios de comunicación chinos las primeras unidades del Model 3 totalmente construidos en la nueva fábrica de Shanghái, tan solo 11 meses después del inicio de los trabajos de construcción de la nueva instalación. Con estas primeras unidades, y a la espera de recibir la licencia oficial de fabricación del gobierno, Tesla se prepara para arrancar a principios del año que viene la comercialización definitiva de este modelo.
Con todas las unidades en color azul, los anagramas traseros en los que se describe el modelo en caracteres chinos, y el software traducido a su idioma, Tesla invitó a los medios de comunicación del sector del automóvil más importantes del país asiático ofreciéndoles la posibilidad de realizar las primeras pruebas reales de conducción, como es el caso de este vídeo de ejemplo.
Durante la conferencia sobre los resultados económicos, Elon Musk ya anunció que se habían producido las primeras unidades del Model en China. Posteriormente pasó a la apertura del configurador, donde se ofrece la versión "Made in China" de la variante más económica que ya se puede reservar.
Ahora la marca lo ha hecho oficial presentando las unidades reales a los medios. "Ya estamos produciendo vehículos completos, a modo de prueba, incluyendo la carrocería, la pintura y el montaje general, en la Gigafactory Shanghai. Hemos superado los hitos iniciales que nos permitirán recibir la licencia de fabricación. Estamos trabajando para cumplir con otros requisitos gubernamentales antes de comenzar a aumentar la producción y la entrega de vehículos desde Shanghai", afirma el comunicado de Tesla.
El precio de partida del Model 3 en China será de aproximadamente de 45.000 euros para una versión con batería estándar en la que se incluye de serie el Autopilot, tal y como lo hace en otros mercados. Tesla aclara que se encuentra sujeto a esa aprobación regulatoria que llegará a finales de año y que no espera realizar las primeras entregas antes del primer trimestre de 2020.
Por ahora, la producción de la fábrica es de muy pequeño volumen, como parte de los preparativos para iniciar la producción en serie de gran volumen. Tesla está trabajando con las autoridades locales para obtener la certificación de fabricación que espera recibir a finales de año, según afirmó la semana pasada la presidenta de Tesla Robyn Denholm en Shanghai. Por ahora, no se conoce la cifra de producción que Tesla podrá alcanzar el Shanghái durante este años, aunque sus planes son alcanzar las 1.000 unidades por semana a finales de año y las 3.000 unidades semanales el año que viene.
La Gigafactoría de Shanghái de Tesla es la primera planta de fabricación de automóviles propiedad íntegramente de un fabricante extranjero que arranca su actividad y también la primera del fabricante californiano fuera de Estados Unidos. Una apuesta lógica para cualquier fabricante (sobre todo de coches eléctricos) que quiera crecer y mantenerse en el mercado. También es una clara señal de que Tesla apuesta por convertirse, cada vez más, en un fabricante de coches de gran volumen, no solo centrado en los clientes que buscan un vehículo premium.