La nueva generación del icónico MINI ya se encuentra bajo desarrollo, lo que significa que una segunda versión eléctrica del utilitario británico llegará a las calles. Su fase de pruebas final ya ha dado comienzo, dejándonos con una serie de fotografías en las que el MINI eléctrico se pone a punto en climas extremos.
Sin embargo, y a decir verdad, esta es la tercera ocasión en la que tenemos la oportunidad de ver al nuevo MINI antes de que se haga oficial su diseño final. En la primera ocasión fue la propia MINI la que lo mostraba camuflado, mientras que la última vez lo pudimos ver completamente al descubierto, en unas fotografías de baja calidad pero suficientemente esclarecedoras.
A pesar del espeso camuflaje que luce la unidad cazada por los fotógrafos, hay líneas que demuestran que el diseño final del próximo MINI ya se encuentra más que finalizado, y que efectivamente la primera vez que lo pudimos ver ya lucía sus líneas definitivas.
Si bien en el frontal no se esperan demasiados cambios, pues se esperan las habituales ópticas redondeadas encuadradas en un capó de formas suaves, es en la trasera donde más arriesgará MINI en términos de diseño, ya que los anteriores grupos ópticos se darán el relevo con unos de formas más agresivas y proporciones triangulares.
Para el desarrollo de la variante eléctrica de la cuarta generación del MINI, BMW se ha aliado con el gigante chino Great Wall Motors, quien será además el encargado de fabricar la versión eléctrica del MINI en la propia China. Está previsto que el próximo MINI Cooper SE (como se ha denominado anteriormente a la versión eléctrica) tome la plataforma específica para coches eléctricos compactos desarrollada por GWM, de nombre Lemon. Sobre esta base ya se articula el ORA Good Cat, un peculiar coche eléctrico que está cerca de comercializarse en Europa.
Está por ver, no obstante, las diferencias que habrá en términos de diseño y proporciones entre la variante eléctrica de este nuevo MINI y las versiones diésel y gasolina, pues estas últimas no se basarán e lna misma plataforma que el MINI eléctrico. En su lugar MINI ha optado por tomar la anterior base, lo que significa que su producción tendrá lugar en la planta de Oxford, en Reino Unido, al igual que sucede con al actual generación.
Otra particularidad de esta nueva generación es que parece que dejará atrás la carrocería de cinco puertas para intentar que por concepto se asemeje todo lo posible al original, así como a la primera generación del MINI de la era BMW.
Si todo va conforme a lo previsto, deberíamos ver el diseño final del MINI eléctrico antes de finales de este mismo año, con una comercialización que tomará lugar a lo largo de 2022.