España es uno de los mayores productores de coches del mundo. Situados en los puestos de cabeza a nivel europeo y mundial, la industria española tiene mucho que decir en el nuevo campo de la movilidad. Muchas marcas ven en nuestro país un destino perfecto para la producción, pero ese apoyo debe acompañarse de ayudas gubernamentales. Una delicada situación de inestabilidad provocó que la semana pasada Volkswagen anunciase una posible retirada del proyecto de Sagunto, a lo que el Gobierno ha respondido rápidamente inyectando más fondos para el PERTE de vehículos eléctricos.
A principios del pasado mes de mayo Volkswagen anunciaba que Sagunto, en Valencia, era el lugar escogido para construir la tercera de sus seis nuevas grandes factorías de baterías. La decisión venía acompañada de una fuerte inversión de capital que dejará más de 3.000 puestos de trabajos directos en la zona, además de otros varios de miles de puestos indirectos. Políticos, empresarios y ciudadanos celebraron por todo lo alto la decisión del conglomerado alemán y rápidamente empezaron los trabajos de preparación de las obras.
Con unas cuantas miles de toneladas de tierra ya movidas, el pasado jueves Volkswagen provocó un momento de pánico institucional al amenazar con retirar la propuesta si el Gobierno central no ayudaba con capital nacional. El problema declarado por los alemanes es que el Ministerio les había prometido una inversión aproximada de 700 millones mientras que en los presupuestos del PERTE de vehículos eléctricos sólo se recogía una inyección en torno a los 300 o 350 millones de euros. Sin la colaboración pública la fábrica de baterías no se llevaría a cabo.
Rápidamente la Moncloa y el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo se pusieron manos a la obra para sumar cientos de millones al programa PERTE_VEC (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica del Vehículo Eléctrico y Conectado). La nueva inversión pública es de 877,2 millones de euros con los que se espera movilizar una inversión total por valor de 2.250 millones de euros en el sector, de los cuales el 90% serán adelantados a los beneficiarios. Con la resolución ya aprobada por la vía exprés, Volkswagen ve cumplidas sus exigencias y todo el mundo espero que vuelvan a la tarea de la construcción.
La planta de baterías de Sagunto será la tercera de las seis propuestas para Europa. Volkswagen aspira a fabricar grandes cantidades de baterías en el centro valenciano. Con 40 GWh de capacidad anual, la producción debería arrancar al inicio del 2026, llegando a su máxima capacidad de trabajo apenas un año después. Paralelamente, en ningún momento Volkswagen ha puesto en peligro el resto de planes para España. Las plantas de Navarra y Martorell no estaban amenazadas por la suspensión del proyecto de Sagunto. Todo ello permitirá a la península ocupar un puesto privilegiado en los planes de uno de los mayores productores a escala mundial.
