Corría el año 2018 cuando Hyundai presentó en sociedad al Nexo. El primer coche de hidrógeno de la compañía se ha convertido en referente mundial de una tecnología a la que le está costando integrarse en el mercado. Las opciones disponibles hoy son escasas, aunque cada vez hay más marcas que apuestan por el hidrógeno, principalmente para los sectores de transporte y la logística. El Hyundai Nexo ya debería haber recibido una actualización, pero esta sigue paralizada por diversos problemas, lo que a su vez ha provocado retrasar los planes que pendían sobre él.
La industria de los turismos impulsados por hidrógeno está, como poco, en pañales. El Honda FCX Clarity fue un adelantado a su época. Lanzado al mercado mucho antes de que el mundo plantease una movilidad eléctrica, fue el primero en atreverse con el cambio, aunque no le fue muy bien. El Toyota Mirai vio años más tarde que había posibilidad de introducir un combustible alternativo en nuestras vidas, y aunque su repercusión fue un poco mayor, no consiguió despertar el interés del público dada la casi inexistente red de carga.
Sin embargo, en los últimos tiempos, los sistemas alternativos ya son una realidad. El hidrógeno tiene mucho recorrido ante sí, y en 2018 Hyundai presentó en sociedad a la primera generación del Nexo. Un SUV con pila de hidrógeno que apenas ha tenido representación en el mercado por los mismos problemas por los que el Mirai tampoco triunfó. A pesar de ello, para Hyundai es un escaparate tecnológico muy importante, y por eso llevan años trabajando en una renovación que nunca llega. Diversos informes apuntan a un nuevo retraso.
En Hyundai apuestan claramente por el hidrógeno para así poder servir una oferta de movilidad única en el mundo. El año pasado el Grupo Hyundai anunció que en 2028 quería vender ofrecer versiones de hidrógeno para todos los modelos comerciales de la gama, y que en 2025 desarrollaría modelos de celdas de combustible para las marcas de KIA y Genesis, pero puede que estas no lleguen ni siquiera a darse ya que los coreanos se están replanteando la estrategia para su oferta de vehículos de pasajeros.
El Nexo pronto debería recibir una actualización, pero esta se ha retrasado una vez más, hasta 2024, dados los problemas surgidos en el desarrollo de la celda de combustible evolucionada. Genesis, marca premium de Hyundai, todavía no ha fijado una hoja de ruta de lanzamientos de hidrógeno, completamente paralizada desde finales del año pasado. Normal que los coreanos se replanteen la estrategia ya que el crecimiento del mercado ha sido prácticamente nulo. A excepción de Toyota ninguna otra compañía apuesta por el hidrógeno como combustible alternativo.
Por el contrario, Hyundai quiere centrarse en su gama eléctrica. Todas las inversiones se centran en mejorar los productos de la oferta Ioniq y EV. El Hyundai Ioniq 5 y el KIA EV6 han demostrado su buen hacer en el mercado, y los planes pasan por ampliar la oferta a la que también se sumará Genesis. Recientemente hemos podido conocer al Hyundai Ioniq 6, y en unos meses debería salir a la luz la siguiente unidad, el Hyundai Ioniq 7. La vía del hidrógeno parece muerta, aunque puede que Hyundai siga apostando por ella como reclamo y escaparate.