El "infierno Verde", que es como se conoce el circuito de Nürburgring, ha sido testigo de la eficiencia y de la capacidad de recuperación de energía del nuevo Mini Cooper SE eléctrico. Las tres configuraciones de su sistema de recuperación de energía, "Green", "Green +" y "One-Pedal Feeling", ofrecen una dinámica diferente de conducción. Si bien en esta última opción están disponibles en el pedal del acelerador las mayores prestaciones y la máxima recuperación de energía, ha sido en el modo "Green", el de mayor eficiencia, el en que ha recorrido, sin pisar el pedal del freno, los 20,8 kilómetros y las 170 curvas con el mínimo consumo.
El circuito de Nürburgring Nordschleife es uno de los más icónicos de la historia del automovilismo. Ha sido testigo de todo tipo de competiciones durante casi un siglo y aunque hoy en día se siguen haciendo carreras de resistencia y turismos, en el día a día funciona como una autopista de un solo carril en la que cualquier persona, previo pago, puede llevar su coche para rodar por sus más de 170 curvas. Su naturaleza exigente hace que además sea un terreno favorito para que diferentes marcas afinen los reglajes de sus coches, sobre todo en lo que se refiere a materia de chasis y suspensiones.
Mini se ha llevado el nuevo Mini Cooper SE eléctrico a este circuito, como ha hecho siempre con cada uno de los modelos que ha lanzado al mercado. Pero en el caso de este coche eléctrico el objetivo no ha sido batir ningún récord de velocidad sino recorrerlo por completo sin pisar en ningún momento el pedal del freno y con el menor consumo de energía posible.
El trazado de Nürburgring lo forman 170 curvas y 20,8 kilómetros.
El sistema de regeneración de energía es una de las peculiaridades que distingue a los coches eléctricos. Gracias a la posibilidad de invertir las fases de un motor eléctrico, este puede funcionar como un generador cuando se disminuye la presión sobre el acelerador, lo que evita tener que pisar el freno en una gran parte del uso diario.
En el caso del Mini eléctrico el conductor puede determinar el nivel de recuperación y el efecto de deceleración asociado. El modo "Green" se caracteriza por buscar la comodidad de conducción y la eficiencia. El "Green +" desactiva el climatizador y la calefacción del asiento con el fin de ahorrar energía. Por último, el modo "One-Pedal Feeling", desarrollado a partir de la experiencia del BMW i3 busca ajustarse a las preferencias del conductor en cada momento, y es capaz de aumentar el dinamismo y a la vez velar por la eficiencia, permitiendo tomar las curvas a gran velocidad. En este modo no sería complicado logar el reto que Mini se había propuesto para esta experiencia. Por eso ha sido en el modo "Green", que habitualmente seleccionarán la mayoría de los conductores el que ha utilizado el fabricante alemán para recorrer las curvas más míticas de Nürburgring a la mayor velocidad posible y sin pisar ni una sola vez el freno.
El nivel de recuperación de la energía de frenado y, por consiguiente, también la deceleración, pueden ajustarse al estilo de conducción y al perfil del circuito. La sensibilidad del pie derecho del conductor es aquí clave. Debe recuperar suavemente la velocidad antes de tomar curvas amplias y de una forma casi instantánea en las bruscas deceleraciones previas a las curvas cerradas. En las pantallas de control dedicadas del Mini eléctrico se puede leer la desaceleración negativa que ofrece la regeneración más intensa, 0,19 g, mientras que la recuperación suave alcanza un valor positivo de 0,11 g. En cualquier caso, la experiencia de Nürburgring se puede trasladar al tráfico diario en cualquier ciudad del mundo.
La prueba se realizó en el modo Green del Mini Copper SE.
Los consumos del Mini Cooper SE
El Mini Cooper SE cuenta con un motor eléctrico de 135 kW (184 CV) de potencia y 270 Nm de par máximo, alimentado por una batería de iones de litio de 32,6 kWh de capacidad que ofrece 270 kilómetros de autonomía según el ciclo WLTP. Esta homologación supone un consumo medio de 12,07 kWh cada 100 kilómetros, lo que lo convierte en uno de los más eficientes del mercado.
Sin embargo, ciclo EPA americano, que es más fiel a la realidad, aumentó este consumo hasta los 18,4 kWh/100 km (177 km de autonomía). Entre estas dos pruebas de laboratorio está la prueba real realizada por Autoblog, que se realizó en zonas residenciales y suburbanas de California, con límites de velocidad comprendidos entre 40 y 96 km/h. En este caso la autonomía resultante estuvo próxima a los 220 kilómetros, lo que supondría un consumo de 14,6 kWh/100 km.