La startup israelí EVR Motors ha presentado un nuevo motor eléctrico de alto rendimiento que, ocupa la mitad de tamaño y es más ligero que motores eléctricos convencionales, lo que se traduce en un mayor rendimiento de los vehículos eléctricos y una reducción de sus costes de producción. La tecnología TSRF en la que se basa permite adaptarlos a todas las tipologías de vehículos eléctricos: dos ruedas, cuatro ruedas y vehículos industriales y a todas las tecnologías eléctricas, híbridas e híbridas enchufables.
Tecnología
EVR Motors ha introducido en este motor eléctrico una tecnología denominada TSRF (Trapezoidal Stator Radial Flux) que ya ha sido desarrollada y probada con éxito en los primeros prototipos. Según las pruebas realizadas, este motor tiene la mitad de tamaño y pesa un diez por ciento menos que un motor con la misma potencia de salida que emplee la tecnología RFPM (Radial Flux Permanent Magnet – Flujo radial e imanes permanentes) de última generación. Según Opher Doron, CEO de EVR Motors, han logrado mejorar el diseño básico del motor eléctrico, "que se ha mantenido prácticamente igual durante las últimas décadas, conservando las ventajas tradicionales de los motores de flujo radial".
EVR asegura que la topología del motor TSRF patentada ofrecerá una mayor densidad de potencia de salida, junto con un par motor superior, reduciendo los costes totales de producción. Esta tecnología admite una amplia gama de salidas de potencia y par, con voltajes que van desde 48 a 800 V, adecuados para diferentes niveles de potencia y para una amplia gama de velocidades.
Pruebas y aplicaciones
Los motores basados en neodimio de EVR funcionan significativamente mejor que los motores RFPM convencionales con unos costes significativamente menores. Por ahora ha compartido los datos obtenidos en las pruebas realizadas con un prototipo diseñado para vehículos eléctricos de dos y tres ruedas. El motor, con un peso de nueve kilogramos, un volumen de dos litros y enfriado por aire, fue capaz de entregar una potencia de 17 kW y un par motor de 40 Nm. Se trata de un resultado que supera con creces los que ofrecen otros motores pequeños de flujo radial refrigerados por aire.
EVR asegura que sus motores eléctricos TSRF basados en neodimio funcionan significativamente mejor que los motores RFPM convencionales con un coste significativamente menor.
En los próximos meses se realizarán estas mismas pruebas con otras versiones de motor, con diferentes voltajes, refrigeradas por líquido y basadas en imanes de ferrita en lugar de neodimio, que reducen su coste. También se están desarrollando motores más grandes adecuados para vehículos de pasajeros convencionales y comerciales.
Las aplicaciones para las que podría adaptarse incluyen a la mayoría de las aplicaciones industriales y de movilidad. Las tipologías abarcan desde vehículos de dos ruedas, pasando por automóviles particulares. En cuanto a tecnologías, podrían adaptarse tanto a vehículos 100% eléctricos (BEV), híbridos enchufables (PHEV) hasta vehículos híbridos convencionales (HEV).
Escalado
Tras esta primera fase, estas máquinas tienen la posibilidad de escalarse y modificarse para adaptar su arquitectura a una amplia gama de vehículos eléctricos, para lo que precisarán la cooperación tanto de los fabricantes de automóviles como de los suministradores habituales de la industria. El primer motor listo para su producción llegará al mercado mundial a finales de este año.
EVR asegura que ya está manteniendo conversaciones con varios fabricantes de equipos originales y proveedores Tier 1 en varios países del mundo, para la realización de demostraciones in situ y arrancar con el desarrollo de unidades adaptadas a sus necesidades. "Nuestros motores pequeños y livianos proporcionarán a los fabricantes de vehículos un mejor rendimiento, flexibilizando su implementación y reduciendo los costes de desarrollo", asegura Doron.