La veteranía del Nissan Leaf, y su más que próxima retirada del mercado, no son excusas para que los de Yokohama no sigan utilizándolo para hacer campañas publicitarias. El compacto japonés fue uno de los primeros coche eléctricos que se produjeron y vendieron a gran escala. Sus 13 años son muchos para un coche, en su día novedoso tecnológicamente, pero que ha visto cómo muchos otros modelos le han ido superando casi día tras día. Aun así, y con todo ese bagaje detrás, la firma sigue promocionándolo con campañas tan curiosas como esta.
En su último reclamo publicitario para Japón, Nissan no ha reparado en gastos para enfrentarlo en una carrera de aceleración a un enemigo sorprendente: un Aero L-29 Albatros. Se trata de un avión de entrenamiento militar fabricado por la compañía aeroespacial checoslovaca Aero Vodochody en la década de 1950. Es un avión a reacción de ala baja, diseñado específicamente para la formación de pilotos. Tiene una cabina de dos plazas en tándem, con el instructor sentado detrás del alumno. El avión está propulsado por un motor turbojet de un solo flujo, lo que le permite alcanzar una velocidad máxima de alrededor de 820 km/h.
Enfrente de él, un Nissan Leaf e+ N-Connecta con 160 kW (218 CV) de potencia eléctrica capaz de desarrollar 340 Nm de par y asegurar un 0 a 100 km/h en tan solo 6,9 segundos, para alcanzar una velocidad máxima de 157 km/h. Técnicamente, aunque el avión de combate alcance velocidades muy superiores, la carrera de aceleración la tiene perdida. Lógicamente, Nissan no iba a grabar un vídeo que no tuviera el resultado esperado:
¿Por qué el Leaf?
Nissan afirma que en el vídeo no hay trucos ni engaños, que todo está grabado y que todo lo que se ve es lo que pasó en la prueba. Todo calculado para que el compacto japonés atraviese la meta solo unos pocos metros antes que el avión.
Lo que sorprende de este vídeo es la intencionalidad de la firma japonesa que ha preferido capitalizar su antigua plataforma eléctrica en lugar de mostrar las bondades de la nueva, la que sustenta al Ariya. El SUV eléctrico no es precisamente un éxito de ventas y el fabricante no parece esforzarse por hacerlo atractivo a sus clientes.
¿No habría sido más inteligente promocionar el sistema e-4ORCE en una campaña de marketing tan ambiciosa como esta? Las cifras de ventas oficiales de 2022 demuestran que está muy lejos de su potencia: 1.205 en China, 2.569 en Japón, 4.631 en Europa y 201 en EE.UU (estas tres últimas cifras, de abril a diciembre de 2022). Un problema que, claramente, está relacionado con la oferta y no con la demanda y que puede estar motivado por la intención de Nissan de explotar las ventas de los SUV e-Power antes que la tecnología totalmente eléctrica del Ariya.