Los monovolumenes están de capa caída. El mercado parece haberlos olvidado como Opel había hecho desaparecer una de sus denominaciones más clásicas. Los tiempos cambian y las tendencias también. El Opel Crossland pronto nos dirá adiós. El MPV más compacto del mercado será reemplazado por un SUV, el nuevo Opel Frontera, tras 17 años sin haber escuchado ese nombre. Eso sí, su apariencia, tamaño y mecánicas nada tienen que ver con las que conocíamos. Se suma a una larga lista de productos hermanados de Stellantis en el segmento C.
El Opel Frontera clásico, el que conocíamos hasta ahora, se presentó a principios de la década de los 90. Con 4,27 metros de largo y con un chasis de largueros y travesaños, el Frontera original quiso ser uno de los todoterrenos más pequeños del mercado, al estilo del Suzuki Vitara. Estuvo presente en los concesionarios durante 16 largos años, aunque sus ventas nunca llegaron a ser tan excepcionales como Opel deseaba. Su final nos dejó vacíos de una categoría que hoy no parece interesar. Muchos de los modelos que conocimos hoy han sido transformados. El Frontera no iba a ser menos.
A medio camino entre el Mokka y el Grandland con versiones 100% eléctricas
Con una apariencia claramente Opel, que ya conocimos en una filtración previa, estamos ante un SUV que trata de posicionarse entre el Opel Mokka y el Opel Grandland. Con aproximadamente 4,4 metros de largo podríamos decir que tiene hermanos tan conocidos como el Citroën C3 Aircross o el Peugeot 2008. Los tres no sólo comparten la plataforma sobre la que se apoyan, también mucha de la tecnología que encontramos en su interior. La presentación es ya habitual. Un sistema de panel dual de gran tamaño corona el salpicadero. En la consola central, muy vertical, se instala el módulo de la climatización y varios espacios portaobjetos como claro recuerdo al modelo que sucede.
A pesar de ser pequeño en tamaño, Opel ha querido ofrecer mucho espacio en el interior. Homologado para un máximo de cinco pasajeros, el maletero ofrece 460 litros de capacidad mínima, una cifra bastante generosa teniendo en cuenta el tamaño del coche. El volumen máximo se consigue al abatir la segunda fila de asientos en una proporción 60:40, llegando hasta los 1.600 litros. Como ya es costumbre en la casa alemana, habrá varios niveles de equipamiento, incluyendo posibles variantes GS Line con un aspecto más deportivo y una carga tecnológica más completa. Se espera que el Frontera esté disponible a partir del próximo verano.
Si bien la oferta mecánica incluirá varias alternativas electrificadas, la unidad más sostenible destaca por un esquema 100% eléctrico. El Opel Frontera Electric contará con un motor de 156 caballos de potencia asociado a una batería de iones de litio que le permitirá ofrecer 400 kilómetros de autonomía, aproximadamente. Es pronto para saber los precios oficiales de venta al público. Opel todavía no se ha posicionado al respecto, aunque debemos esperar una tarifa mínima en el entorno de los 40.000 euros, puede que un poco más. Un precio sensiblemente superior al que ofrece el Opel Mokka Electric con 340 kilómetros de autonomía homologada.