Hacer la competencia a los vehículos eléctricos chinos está siendo un auténtico quebradero de cabeza para los fabricantes europeos, que van buscando el sitio y las maniobras clave para conseguir recuperar la cuota de mercado que han perdido en el sector del automóvil.
En cuanto a Volkswagen, lo que tienen claro es que tienen que recuperar parte de la esencia de los modelos de combustión tradicionales que tan bien funcionaron en su momento. Y en el caso del Volkswagen ID.3, la evolución futura tiene como objetivo acercarse al espíritu del Volkswagen Polo, además de mejorar lógicamente en términos de autonomía, pero también de calidad.
Más Polo, y menos ID
No es ni mucho menos algo nuevo o que sorprenda, porque en realidad hemos visto dar los primeros pasos en este sentido con el Volkwagen ID.2, que básicamente es el Polo en versión 100% eléctrica. Y ya sabemos que el Polo con mecánicas de combustión pretende mantenerse en el catálogo incluso hasta 2030.
Este nuevo modelo lo veremos lanzado en 2025, y será el primero que inicie esta tendencia de recuperar los diseños tradicionales, en lugar de seguir intentado 'colocar' estéticas totalmente distintas a lo que se venía haciendo hasta ahora.
Eso es lo que ha entendido Volkswagen que los clientes reclaman de la experiencia acumulada con la variedad de modelos 100% eléctricos que ya venden, y que por tanto también aplicará en la próxima evolución del ID.3, así como de las que lleguen más adelante.
El nuevo Volkswagen ID.3 heredará parte del diseño que veamos en el Volkswagen ID.2 de producción en serie, y estará un escalón por encima en cuanto a segmento, que es lo que le corresponde, haciendo uso de una adaptación de la plataforma MEB del grupo alemán.
Otras mejoras que le esperan al ID.3 de Volkswagen
Toda esta información viene a recopilar lo que el jefe de desarrollo de Volkswagen, Kai Grünitz le ha ido contando a distintos medios en las últimas semanas, y especialmente en unas declaraciones recogidas por el medio británico Auto Express.
Además, se habla de un futuro Volkswagen ID.3 que buscará mejorar la calidad percibida del modelo, además de reducir los costes de producción y aumentar la autonomía. Cabe destacar que esta última, en el mejor de los casos, llega a los 600 kilómetros por recarga actualmente.
