La propia Porsche ya ha confirmado que el que fuera su primer SUV, el Cayenne, se volverá 100% eléctrico a partir de su próxima generación. Pero, antes de que llegue ese momento tan crucial, había que realizar una última operación estética al gran salvador de la marca. El Porsche Cayenne 2024 se presenta con más cambios de los que se pueden apreciar a simple vista. Modificaciones que lo mantienen en la partida y que siguen haciendo de él uno de los SUV más deportivos que hay en el panorama internacional.
La primera generación del Cayenne apareció en 2002. Por entonces, muchos se llevaron las manos a la cabeza ante el giro tan drástico de una marca especializada en deportivos. Sin embargo, el Cayenne demostró que había mucho mercado y sus ventas catapultaron a una marca que no pasaba por su mejor momento. Desde entonces se han ido sucediendo las generaciones. La última de ellas presentada en 2018 recibe ahora un lavado de cara de mitad de ciclo comercial que, si bien apenas deja rastros evidentes en el exterior, sí que ofrece importantes modificaciones en el interior.
Sin modificar sus medidas, el nuevo Cayenne integra un morro ligeramente diferente. Las nuevas ópticas delanteras se asemejan mucho a las de los últimos prototipos de Porsche con los ya habituales cuatro puntos de LED diurnos que se han convertido en imagen de la marca. En la parte posterior, también se renueva el piloto principal que mantiene la unión mediante una franja lumínica que hace fácil su identificación en la noche. El resto del conjunto se renueva con juegos de llantas de hasta 22 pulgadas y una paleta de colores rejuvenecida, aunque siempre es posible optar por cualquiera de los colores de Porsche Manufaktur al gusto de cada cliente.
En su interior sí hay cambios más evidentes. El principal es que el Cayenne recibe el salpicadero del Porsche Taycan. El eléctrico dona su presentación al buque insignia de la familia SUV, incluyendo la instrumentación digital curvada con 12,6 pulgadas de tamaño. A su derecha se instalan dos pantallas adicionales. La principal es la que gestiona todo el sistema multimedia con un tamaño de 12,3 pulgadas. La secundaria, exclusiva para el acompañante, ofrece un formato de 10,9 pulgadas. Permite que el pasajero pueda controlar diversas funciones del sistema para que así el conductor no tenga que desatender la conducción.
En lo que a equipamiento puro y duro se refiere, también hay novedades, muchas de ellas centradas en la mejora del confort de los pasajeros. Se incluyen faros matriciales de LED, mejoras notables en la conectividad inalámbrica con dispositivos móviles, un sistema de climatización renovado con función automática de recirculación de aire en las proximidades de zonas con malos olores, o diferentes asistentes a la conducción que incluyen una ayuda al cambio de carril y el sistema de ayuda a la esquiva, denominado InnoDrive.
Las últimas novedades llegan debajo del capó. La oferta mecánica cambia con la desaparición de las versiones híbridas enchufables más potentes de la gama, incluyendo el todopoderoso Turbo S. El motor de seis cilindros constituye la base de la cadena cinemática del Cayenne E-Hybrid. En combinación con un nuevo motor eléctrico mejorado en 30 kW (40 CV), la potencia conjunta aumenta hasta 470 CV. Equipado con una batería de alta tensión con una capacidad aumentada a 25,9 kWh, ahora alcanza una autonomía eléctrica de hasta 90 kilómetros, según el ciclo de medición WLTP. Dichas modificaciones son recibidas igualmente por el Cayenne Coupé.
Precios del Porsche Cayenne E-Hybrid 2024
- Cayenne E-Hybrid: 107.327 euros.
- Cayenne E-Hybrid Coupé: 110.352 euros.
