Hablar de Ferrari es hablar de la marca de deportivos más famosa, deseada y copiada del mundo. Los italianos son sinónimo de pasión, velocidad y deportividad. Desde su coche más barato al más extremo de sus superdeportivos, Ferrari pone su sello particular en todo lo que toca. Los tiempos están cambiando, la electrificación ya forma parte del presente de la compañía y pronto del futuro. Ferrari está desarrollando su primer coche eléctrico para demostrar que es capaz de adaptarse a los cambios, aunque se reserva varios ases bajo la manga para hacerlo más especial si cabe.
No es ningún secreto que en Maranello llevan años trabajando en el desarrollo de un coche que marcará un antes y un después en la casa de Enzo Ferrari. Ya en 2022 empezaron a surgir los primeros rumores sobre él. Los italianos siempre han defendido que su primer coche eléctrico iba a ser un “verdadero Ferrari”, algo mucho más fácil de decir que de hacer. Los Cavallino Rampante no sólo son famosos por su color rojo, atractivo diseño y extrema velocidad. El sonido es un factor clave en todos ellos, desde el más potente V12 al más moderno V6 híbrido de 1.200 caballos que monta el Ferrari F80.
Un rugido muy natural para un coche 100% eléctrico
El sonido de un deportivo es parte de su esencia más visceral. Escuchar el rugido de un motor a altas velocidades es una de las experiencias más apasionantes que hay al conducir. También es parte fundamental del precio que Ferrari exige a cada uno de sus clientes, que no es poco. Es por eso que desde el principio, los italianos han tenido muy claro que debían ofrecer algún tipo de sistema acústico para su primer coche eléctrico. A principios de 2023, Maranello presentó una patente extremadamente compleja que simulará el rugido de un bloque de gasolina.
Hasta ahora han corrido ríos de tinta acerca de ese trampantojo, pero ahora ya podemos ponerle nota musical. Una de las varias unidades de prueba que Ferrari está rodando ha sido descubierta entrando a las instalaciones italianas. En dicho prototipo podemos ver cuatro claras salidas de escape, simuladas obviamente, que emiten un sonido bastante particular. Ferrari no es la primera en usar un sistema simulado de sonido para un coche eléctrico. Actualmente, Hyundai lo emplea para su Ioniq 5N, al igual que Dodge para su primer muscle car eléctrico, el Charger Daytona EV que fue presentado hace escasas semanas.
A priori, el sonido parece bastante natural, aunque sabemos que es falso. Lo realmente importante, y complejo, será sincronizar el rugido con la aceleración, la velocidad y el nivel del acelerador del coche. En unos meses saldremos de dudas. Mientras tanto, Ferrari sigue poniendo a punto su coche más especial. Los italianos se han fijado en otros deportivos eléctricos de alto rendimiento, como el Model S Plaid que fue interceptado saliendo de las mismas instalaciones en las que hoy vemos al prototipo. Si bien Ferrari adopta la electricidad como método de vida, Benedetto Vigna, CEO de Ferrari, ha sido tajante en sus repetidas declaraciones: “aún hay camino válido para los coches de combustión”.